A estas alturas, Rubby Pérez, debe estar estudiando sus nuevas estrategias para seguir agigantando y cotizando su figura en el mercado del merengue. Porque, sin duda, está entre los más cotizados de nuestro ritmo vernáculo por excelencia.
La Voz más alta, como le llaman los expertos y sus seguidores, se llevó las estatuillas del Casandra en las categorías de “Merengue del año” y la más anhelada por los merengueros del patio: “Orquesta del año”.
Hace ya algo más de dos años, Rubby, el artista del merengue, decidió su separación de la empresa Los Toros Records. Y los frutos no se han hecho esperar, al crear su propia empresa. Con su álbum “Tonto corazón” en el 2005 fue nominado en las categorías “Video del año”, “Merengue del año” y “Orquesta del año”.
Hacía mucho tiempo, Rubby, debió haber tenido su propia empresa. Lograr un equipo de trabajo como el que ha conseguido, donde Frank Reyes, su manager está a la cabeza, dirigiendo un equipo integrado además por un reconocido periodista del “medio” y un rod manager de la categoría y el criterio de Nelson Morel.
El triunfo de Rubby Pérez ahora en los premios Casandra no fue casual. Es el producto de una estrategia puesta en práctica por su equipo. Porque calidad, Rubby siempre ha tenido como merenguero, además de que éste artista es un abanderado de la calidad lírica, interpretativa y musical.
Rubby, desde que trascendió al lado de Wilfrido Vargas cuenta con una historia radial colmada por el éxito. Son muchos los éxitos merengueros de Rubby como “Volveré”, “Así no te amarás jamás”, “Amores extraños, “Sobreviviré”, “Estoy sintiendo la necesidad”, “Tú vas a volar” etc. De ahí que desde que lograra su independencia del Toro, esa estrategia para alcanzar un posicionamiento en el merengue que le permitiera llegar Casandra comenzó con “Tonto corazón” y fue “El Perro ajeno” que la coronó.
Es entonces que, luego de alcanzar el codiciado premio de “Orquesta del año”, actuar con éxito en el Festival Presidente de Música Latina, presentarse ante más de 50 mil personas en Venezuela en un regreso éxito a ésa plaza, viene la pregunta ¿cuál será el próximo reto de Rubby? ¿Será Altos de Chavón?.
La estrella de Rubby debe seguir brillando aún más en el firmamento artístico y es Rubby uno de los pocos merengueros de calidad que no ha ido a Altos de Chavón.
Ya por ese escenario han pasado Juan Luis Guerra, Fernando Villalona, Héctor Acosta (El Torito), Toño Rosario, Los Hermanos Rosario y otros grandes del merengue que lo han llenado y hasta lo han reventado de gente como ocurrió con el líder de 440 que lo hizo dos veces. Allí estuvieron de la mano de Luis Medrano Milly Quezada y repitió con éxito Sergio Vargas.
Rubby ha de seguir logrando producir más éxitos musicales y radiales en este 2006, pero para seguir creciendo debe llenar Altos de Chavón. Pues ya se ha presentado con éxito en el Teatro Nacional con “Volando alto”. Lo mismo pasó en Santiago y el pasado año llenó el hotel Jaragua con su concierto “Que cante el cantante”.
Está llamado a seguir creciendo y luego de ganar los premios Casandra no debe caer en una labor rutinaria durante el 2006. Por eso, su próximo reto debe ser llenar Altos de Chavón en una noche de éxitos y de aplausos que bien puede ser apadrinada por el mago del espectáculo, Luis Medrano.
Y es que Rubby Pérez como otro gigante, está llamado a emular a los otros grandes del merengue que como Juan Luis, Fernandito y Sergio llenaron Altos de Chavón. Y se llenaron de gloria, desde entonces. Así que “Todos, con Rubby, pa´Chavón”.