La ONU destacó que la nación caribeña registra una tasa de feminicidios de 2.9 por cada 100 mil mujeres.
Desde el 1 de enero hasta el nueve de diciembre, al menos 50 mujeres perdieron la vida en República Dominicana debido a la violencia intrafamiliar, colocando al país como el segundo con más casos en el continente, según advirtió la ONU.
La organización destacó que la nación caribeña registra la segunda mayor tasa de feminicidios en América, con 2.9 por cada 100 mil mujeres.
Tan solo en junio pasado, se contabilizaron 11 fallecimientos por esta causa en el territorio nacional. La ONU recientemente señaló que una de las asignaturas pendientes del país es la reducción de la violencia contra las mujeres.
Estas cifras no sorprenden, ya que el Ministerio de la Mujer informó que los feminicidios aumentaron un 23.5 por ciento en el primer semestre, en comparación con el mismo período del año anterior, destaca Prensa Latina.
La Fundación Vida Sin Violencia ha instado al Gobierno a revisar las políticas públicas, enfocándose en campañas para fomentar el respeto a la mujer y la educación en valores de igualdad desde la infancia, además de garantizar mecanismos de protección para las denunciantes.
La prensa local mensualmente documenta historias desgarradoras de muertes violentas por razones de género, mientras que las cifras plantean un desafío para las autoridades, que se enfrentan a uno de sus principales retos sociales.
Estas cifras no sorprenden, ya que el Ministerio de la Mujer informó que los feminicidios aumentaron un 23.5 por ciento en el primer semestre, en comparación con el mismo período del año anterior.
Aunque las autoridades amplían los programas de concientización, los números confirman que las políticas públicas son insuficientes para detener los homicidios contra mujeres en el ámbito doméstico o laboral.
Una investigación de la Institución Global Democracia y Desarrollo reveló que en el 43.6 por ciento de los asesinatos cometidos entre 2016 y 2022, la víctima ya estaba separada del agresor y lo había denunciado por acoso ante las autoridades.
Los analistas coinciden en señalar que para abordar de raíz este problema es necesario fortalecer el sistema de justicia y destinar más recursos del Estado a prevenir y abordar los actos de violencia.
Las acciones propuestas incluiría el desarrollo de programas de atención integral a las víctimas, campañas de sensibilización y la consolidación de las instituciones encargadas de velar por la igualdad y protección de este grupo de la población.