El doctor Carlos Sánchez, diputado al Parlacen, recomienda a las autoridades abrir la posibilidad de comprar vacunas rusa y cubana, ante el evidente retraso en las entregas de las grandes farmacéuticas.
El epidemiólogo y médico salubrista, doctor Carlos Sánchez considera que el programa de vacunación que desarrollarán las autoridades dominicanas para contener el avance del coronavirus, debe incluir a todo el que se encuentre en la República Dominicana, sin importar su nacionalidad ni su estatus migratorio.
El también diputado al Parlamento Centroamericano (Parlacen), estima que eso es lo más viable por un tema de salud pública, ya que esas personas con estatus de no residentes, están conviviendo con los dominicanos y por ende deben ser inmunizados para controlar la propagación del virus a nivel colectivo.
¨Pero voy más allá, República Dominicana tiene que acercarse a Haití, porque lo que necesitamos es una campaña insular contra el coronavirus. En ese sentido habría que vacunar unas 22 millones de personas en toda la isla¨, explicó el doctor Sánchez al ser entrevistado en el programa República de la Verdad.
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En otro orden, recomienda a las autoridades dominicanas sopesar la posibilidad de adquirir también la vacunas rusa y la cubana, ya que el retraso en las entregas de las dosis adquiridas a las empresas AstraZeneca y Pfizer podría provocar una profundización de la crisis que vivimos como consecuencia de la pandemia, que en este mes ha tenido un repunte por los excesos de la población en el mes de diciembre.
Afirma que la vacuna rusa y la cubana, respectivamente, se podrían convertir en la tabla de salvación del mundo, ante la estrategia de las grandes farmacéuticas de retener la producción para venderla al que más dinero ofrezca.
¨Por tanto nuestro país tiene que estar abierto, e iniciar negociaciones tanto con Rusia, como con Cuba para que este año toda la población pueda ser vacunada¨, argumenta.
Advierte que habrá un retraso en la producción y distribución de la vacuna en los países de ingresos medios y los pobres, en vista de que los suplidores están priorizando las entregas en función de la capacidad económica y de la oferta que reciben por parte de las naciones interesadas.
Califica esos retrasos como ¨muy peligrosos¨, ya que, durante el proceso, podrían ir apareciendo algunas variantes de coronavirus resistentes a las vacunas.
Estima que eso ralentizará el proceso de vacunación en todo el mundo, a un punto de que se irá todo el 2021 en ese programa; y quizá se necesite tiempo del 2022 para completar la meta.
Sobre la calidad de las vacunas, el doctor Sánchez Solimán considera que todas las que se han producido son confiables, por lo que llama a la población a colocarse sus dosis inmediatamente estén disponibles en el país.
Resalta la buena cobertura de pruebas PCR que tiene la República Dominicana, que de acuerdo a las estadísticas está aplicando más de cien mil pruebas por millón de habitantes.
¨Este gobierno y las autoridades de salud han cumplido la promesa que se hizo en campaña de elevar la cantidad de pruebas diarias. Hemos tenido días en que se han realizado entre ocho y diez mil pruebas, que es una cantidad muy superior a las que se hacían antes de agosto¨, expone.