Por Endry Andrés González.- Por el lugar geográfico donde me encontraba el día de las elecciones fui de los últimos en enterarme que estas se habían suspendido. Tenía compromisos en la zona rural de San Felipe, Puerto Plata.
Busque señal para reportarle a las autoridades de mi partido(PRM) que había descubierto una casa al lado del centro de votación donde se estaban comprando; cédulas, voluntades y hasta presionando a los votantes, los guardias que estaban de servicio me decían que no tenían la potestad de entrar a esa casa, es entendible, sin una orden de un juez no es permitido, pero yo no aguanté ver como en mis ojos unos maleantes de este hermoso ejercicio (La política) querían imponerse a como dé lugar, yo entré y desbarate la operatividad de esa actividad.
La noticia fue fuerte para mí, quedé sin palabras por varios minutos, tenía una impotencia grande, me decía a mí mismo aquí no se puede luchar más este país hay que dejárselo a ellos. Lloré, ¡SÍ LLORE¡ de la impotencia, solo pensaba en mis amigos en esos jóvenes que con sacrificio decidieron darlo todo por el bien de nuestro pueblo.
Me calmé y decidí irme a la ciudad, de camino ya había una reunión montada del equipo político del cual soy parte. En el camino intentaba expresarme escribiendo algo, pero no podía, nada me fluía. Por mi distancia fui el último en llegar, tenía el autoestima por el suelo, intentaba llamar mis amigos candidatos pero si lo hacía era hacerlo sentir peor, mi estado de ánimo no era el mejor.
Cuando llego a la reunión veo los ánimos caldeado, y algunos con una sonrisa como si no había pasado nada (Era una forma de darnos ánimos a los que estábamos destrozados).
En política existe algo llamado logística, este dinero es utilizado, para transporte y refrigerios de nuestros votantes también la comida de nuestros dirigentes.
Muchos de mi amigos jóvenes, sin recursos pero si con un deseo enorme de cambiar el sistema político de nuestro país, dejando atrás el populismo y la mala práctica de compra de voluntades, emprendieron proyectos que les llevó años construirlos, preparando sus propuestas, ahorrando, dejando de darse un gusto para servirle de manera honrada a nuestro pueblo, muchos tomaron prestado y otros basaron sus proyectos en amigos y familiares.
¿Qué hacemos con jóvenes que dieron el todo por el todo en el pasado proceso electoral, y que sí quieren hacer las cosas de manera diferente como la merecen nuestra gente? es chocante que por culpa de nuestro sistema político perdamos la oportunidad de ser dirigidos por jóvenes de buenas ideas, jóvenes honestos y capaces….
Pero como decía en mis redes sociales , Un abrazo grande, motivador y sincero , para esos amigos que de manera humilde se atrevieron, hicieron un esfuerzo para ir una contienda electoral (El cual terminó siendo un matadero electoral) gastando sus ahorros para servir a nuestro pueblo de manera honesta y responsable , lo que sucedió es penoso, y todos en diferentes dimensiones sentimos dolor y rabia, pero esa rabia debemos depositarla en las urnas apoyando a los nuestros, llegando a nuestros recintos como podamos, pero vamos ayudar esa generación que compite de manera desigual económicamente hablando. Amigos suspendieron las elecciones, pero ahora con más fe, nuestra generación se va imponer.