Los incendios forestales fueron avivados por fuertes vientos. Arrasaron este lunes con la región vinícola de California. Al menos 10 muertos y un centenar de heridos, han sido reportados por las autoridades.
Se informa que unas 1.500 viviendas y negocios quedaron destruidos y miles de personas tuvieron que huir de las llamas que avanzaban sin control.
Las autoridades temen que la cifra de fatalidades pueda aumentar. Las autoridades de Sonoma dijeron haber recibido unos 100 reportes de familiares y amigos de personas de la zona que no se habían podido localizar.
Reportes de prensa señalan que residentes que pudieron huir a tiempo se mostraron sorprendidos por la velocidad y ferocidad de llamas que convirtieron el incendio en el peor en la historia de California y obligaron al gobernador Jerry Brown a declarar el estado de emergencia.