Nueva Zelanda y Japón sufrieron este lunes sendos terremotos a pocas horas uno del otro, ocurriendo en este último tsunami que mantuvo en vilo a la población.
El terremoto Nueva Zelanda fue de 6 grados de magnitud y afecto la Isla Norte de Nueva Zelanda, una región que aún se recupera de los daños causados la semana pasada por otro seísmo de 7,8 grados.
El Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS), que vigila la actividad sísmica en todo el mundo, situó el hipocentro a 10 kilómetros de profundidad cerca de la costa este de la Isla Norte.
La sacudida, revisada al alza después de que inicialmente fuera medida en 5,6 grados, ocurrió a 75 kilómetros al noreste de Castlepoint y a 204 al noreste de Wellington.
Horas antes se había producido un sismo en Japón y luego una ola de un metro tocó las costas cercanas a la planta nuclear de Fukushima.
El terremoto en Japón fue de 7,4 grados y luego se decretó una alerta de tsunami , levantada posteriormente.
Según las informaciones preliminares no se registró ningún incidente en la zona, muy expuesta tras el terremoto y posterior tsunami del 11 de marzo de 2011, indicó a la AFP un portavoz de Tepco (Tokyo Electric Power).