La Suprema Corte de Justicia de Estados Unidos derogó este lunes una ley que en Texas obligó al cierre de más de la mitad de clínicas abortivas y que había sido aplicada de forma similar en otros estados conservadores, informó Voa Noticias, que señala que magistrados votaron 5-3 a favor de las clínicas tejanas que consideraron que la ley establecía regulaciones indebidas que buscaban hacer más difícil el abortar.
De inmediato el presidente Barack Obama aplaudió la decisión del Supremo. "Me complace ver que el Tribunal Supremo protege los derechos y la salud de las mujeres", afirmó el mandatario en comunicado divulgado por la Casa Blanca este lunes.
El magistrado Stephen Breyer dijo en nombre de la mayoría de la Corte que tales restricciones son médicamente innecesarias e inconstitucionales en cuanto a que limitan los derechos de las mujeres al aborto.
La ley de Texas exigía que los doctores que realizan los abortos tuvieran privilegios para admitir a pacientes en hospitales cercanos a las clínicas de abortos en caso de emergencia y que las clínicas, usualmente pequeñas, contaran con el costoso equipo de emergencia que normalmente solo tienen los hospitales grandes.
Texas aprobó la ley en 2013 y la defendió argumentando que era necesaria para proteger a las mujeres y asegurarse que estas sean atendidas en lugares medicamente seguros.
El presidente estadounidense, Barack Obama, aplaudió hoy la decisión adoptada por el Tribunal Supremo de Justicia, de bloquear la aplicación de leyes contra el aborto en el estado de Texas.
Obama recalcó que esas restricciones perjudican la salud de las mujeres y se convierten en un obstáculo inconstitucional en el camino de la libertad reproductiva de las féminas.
El mandatario subrayó que su gobierno sigue comprometido con la protección de la salud, incluyendo la protección del acceso de las mujeres a una atención médica segura, asequible y a respetar su derecho a determinar su propio futuro, resalta el sitio digital The Hill.