Por: Jhonathan Pichardo
"No basta con querer: debes preguntarte a ti mismo qué vas a hacer para conseguir lo que quieres". -Franklin D. Roosevelt, (1882-1945).
En lo empresarial al igual que en la política es normal que nos preocupemos por la competencia. Principalmente, en la segunda, donde se le dedican 24 horas del día y los siete (7) días de la semana actividades proselitistas debido a que, cada segundo cuenta. Cuando se inicia un proyecto: se planifica, organiza y controla cada evento a llevar a cabo por el candidato, de hecho, en el equipo es normal un asesor de imagen; que se encarga del potencial de la imagen, tomando como punto de referencia los objetivos que desean lograr.
En un principio, se realiza un proceso de investigación, si es que en verdad queremos llegar a ser diferentes a los demás. Aunque el equipo de campaña organice actividades de: caravana, bandereo, mano a mano, su propuesta debe de tener un toque de originalidad. En aras de evitar algo que Juan Bosch, definía: "Lo que es igual no es ventaja", por supuesto, su plan de trabajo tiene que estar orientado a solucionar las necesidades y problemáticas del mercado meta, dígase: alta, media y baja burguesía. Sin embargo, es normal encontrase con ciudadanos con ciertas dudas, pero como decía Bosch, en su discurso de octubre del 1961, al pisar tierras dominicanas tras la caída de la dictadura de Trujillo: “hay que Matar el Miedo”. Y esta parte, solo se puede confrontar logrando agregar en la propuesta, la continuidad de lo que está bien, claro está, con un toque evolutivo: "ya que lo mejor está por venir". En momentos como este se requiere de un líder; que no sea sinónimo de confrontación, al contrario, que sea modelo de integridad y confluencia entre todos los sectores sociales, al fin y al cabo, se le dará continuidad a la armonía que siempre ha existido.
En el transcurso, el candidato presidencial, tiene que librar grandes batallas; llegando a enfrentar percances cotidianos… Ahora bien, muchos procesos electorales desarrollan antagonismos infantiles: instigación familiar por sectores maléficos, fiscalización a los bienes unipersonales del candidato. Para un líder, le es fácil manejar con estos "comentarios", pues es necesario constar de dos cualidades esenciales: carácter y personalidad. Estas son condiciones interesantes de sí; que puede ir adquiriendo en el transcurso de su formación o experiencia (tiempo y dedicación).
Por lo tanto, lo llevan a posicionarse como una persona con aptitud firme y rezagada ante cualquier situación disociativa, que no aporte en lo más mínimo al porvenir de la nación. En esta parte puedo ser directo, lo material (un Rolex) no puede definir lo humano de una persona, porque ser humilde no es sinónimo de pobreza. De lo contrario, Franklin D. Roosevelt, no hubiera sido cuatro (4) veces Presidente de los Estados Unidos (1933-1945).
En resumen, el candidato, debe de manejar situaciones como esta con sutileza —obviando los disociadores—. Después de todo, la sociedad, le seguiráotorgando confianza y valoración. De todas formas, al final del túnel siempre sale a relucir la verdad, no será la última vez que hagan este tipo de "comentarios", pues como habrán escuchado antes: “la envidia solo tiende a existir a ausencia del bien".
Ahora es cuanto, el candidato debe de continuar con los planes de trabajo, llevar a cada rincón el proyecto, "lo mejor está por venir". Sabiendo lo que somos y lo que aportaremos para la patria en lo social, económico y político. Luego seremos lo que otros llaman "Continuar lo que está bien". Entonces, "Siempre se debe preferir la acción a la crítica"(Roosevelt).
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