Las noticias mañanera de la muerte de mi hermano en música, Cheo Feliciano me ha dado un choque fuerte. Estoy de luto sobre esta gran perdida de un músico y un gran caballero.
Nunca me olvidaré de sus pimentosos golpes de bongó cuando primer lo conocí tocando con Joe Cuba en las montañas de los Catskills de N.Y.
Un hombre elegante, guapo, y con un gran sentido de humor tuvo la fuerza interna de quitarse de la industria para sanar su espíritu y cuerpo regresando, después de dos años, con su propio disco como solista llamado CHEO y quien Fania puso en mis manos a producir.
Trabajar con alguien que fue tan gran ejemplo de rescate, gentileza y dedicación a su arte esta al centro de mi propia carrera.
Fue quien abrió mi concierto en Carnegie Hall con su banda cuando estrené la opera HOMMY además de cantar el papel del Tío José en la opera propia que aun hoy sigue siendo un clásico. Su voz sutil, sus improvisaciones ingenioso, y su suave sentir de fraseo son las cosas que hacen una leyenda.
Cheo Feliciano será enormemente echado de menos de la escena y de mi corazón. Mi mas profundo pasame a su esposa Coco y su familia.
Larry Harlow, El Judio Maravilloso