<b>República Dominicana apoya la
existencia de un instrumento jurídico internacional que promueva y proteja los
derechos de las personas envejecientes, que estandarice esos derechos y cree
los mecanismos para hacerlos exigibles.</b>
La posición del país fue expuesta en el marco
del Cuarto Período de Sesiones del Grupo de Trabajo de Composición Abierta
sobre el Envejecimiento establecido por la Asamblea General de la ONU en 2010 y que se reunió en Nueva York entre el 12 y el 15 del
cursante mes de agosto, informó la Unidad de Comunicaciones del Ministerio de
Economía, Planificación y Desarrollo (MEPyD).
La delegación que asistió al evento
estuvo integrada por las licenciadas Nathali María, directora ejecutiva del
Consejo Nacional de Personas Envejecientes (CONAPE); Nurys Presbot de Michel,
quien representó al ministro de Economía, ingeniero Temístocles Montás y
Natalia Gómez, técnico de Cooperación Internacional de la referida dependencia
gubernamental.
Presbot de Michel, asesora y
coordinadora de Seguimiento a Organismos Internacionales del MEPYD, institución
integrante del CONAPE, presentó ante el
Grupo la declaración de apoyo de República Dominicana a la elaboración y necesidad
de la Convención Internacional de los Derechos de las Personas Envejecientes.
La funcionaria, quien expuso en
representación de la delegación dominicana, recordó que el país desde las
acciones de Madrid (2002) y Brasil (2007), así como en las reuniones de
seguimiento celebradas en los países latinoamericanos, ha asumido el compromiso
de impulsar una convención internacional de los derechos de la población tan
vulnerable y discriminada.
Entiende que estos derechos no están
particularmente establecidos en la construcción del texto y el contexto de los
mandatos universales y regionales sobre los derechos humanos, ya que no
afrontan la discriminación por edad, ni enfocan el envejecimiento desde una
perspectiva social y demográfica, salvo ciertas excepciones especificas de
compromisos de las Naciones Unidas, que no dejan de ser limitados.
En ese mismo orden, comentó que las
declaraciones existentes referentes a derechos humanos, económicos, sociales y
culturales, no hacen referencia de manera explícita a las personas mayores,
aunque sus disposiciones se deben aplicar a todos los miembros de la sociedad.
Destacó que tampoco el adulto mayor
está contemplado de forma específica en los Objetivos de Desarrollo del
Milenio, como lo están otros grupos de
la población.
Presbot de Michel reiteró que el
país aboga por el fundamento de la inclusión que trilla ese camino, por lo que
tanto la
Estrategia Nacional de Desarrollo como las políticas públicas
avaladas por el Plan Plurianual del gobierno promueven los derechos
fundamentales de las personas mayores, mediante las leyes de protección y
actuando con energía para alcanzar la meta de cero envejeciente indigente, a
través de los múltiples programas ejecutados por el CONAPE.
La presentación de la delegación
dominicana concluyó con el apoyo a la existencia de un instrumento
internacional jurídicamente vinculante, que estandarice los derechos de las
personas mayores y los mecanismos para hacerlos exigibles.
Las estadísticas
Las delegaciones de diferentes
países que participaron en la actividad expresaron su preocupación por el
acelerado envejecimiento de la población mundial.
Las estadísticas proyectadas al 2050
indican que se pasará de aproximadamente 7,000 millones de personas a 9,000
millones y que más del 20% de la población tendrá 60 años o más y habrá más
personas mayores de 85 años, principalmente en el mundo en desarrollo, según
los estudios de la UNFPA,
ONU.
Indicaron que el envejecimiento progresivo
que experimenta el mundo no tiene precedentes en la historia, debido al actual
proceso de transición demográfica mundial, caracterizado por niveles bajos de
natalidad y mortalidad, así como el aumento progresivo de la esperanza de vida.
Según la misma fuente, para el 2009
el número de personas con 60 años o más superaban los 737 millones en el mundo
y representaba el 10.8% de la población mundial dentro de los cuales se cuentan
100 millones de personas de más de 80 años.
Los
jóvenes de menos de 25 años representan un 43% de todos los habitantes del
planeta y los mayores de 60 años alrededor de 1,000 millones, los que podrían aumentar a 2,400 millones, al 2050.
Las proyecciones para la región
latinoamericana, reflejan que más de la cuarta parte de la población será
adulta mayor, lo que representara alrededor de 180 millones de ciudadanos
mayores.
Las
cifras en RD
República Dominicana no está ausente
en la tendencia de crecimiento progresivo del adulto mayor.
De
acuerdo con los datos proyectados por la Comisión Económica
para América Latina y el Caribe (CEPAL), al 2010 la población de 60 años y más se colocaba en
880,000 personas, para 2025 ascendería a 1, 537,000 y para el 2050 a 2, 875,000
envejecientes.