<b>Las crisis financieras han propiciado inestabilidades sociales y
políticas en el mundo, con resultados catastróficos en términos de daños
humanos y materiales.</b>
La crisis de las
hipotecas subprime, más bien conocida como hipoteca de alto riesgo, es una
causante del desastre que estamos presenciando. Es un fenómeno que por
desconfianza crediticia se extiende inicialmente por los mercados financieros
americanos y es la alarma que pone el punto de mira en las llamadas hipotecas
basuras europeas, desde el verano del 2006 y se evidencia al verano siguiente
con una crisis bursátil.
Generalmente, se la considera
el detonante de la crisis financiera de 2008 y de la crisis de la Burbuja
inmobiliaria en España.
La crisis hipotecaria
ha tenido desbalances negativos con numerosas quiebras financieras,
nacionalizaciones bancarias, constantes intervenciones de los Bancos centrales
de las principales economías desarrolladas, profundos descensos en las
cotizaciones bursátiles y un deterioro de la economía global real, que ha
supuesto la entrada en recesión de algunas de las economías más
industrializadas.
Las hipotecas de alto
riesgo eran un tipo especial de negocio, preferentemente utilizado para la
adquisición de vivienda, y orientada a clientes con escasa solvencia, y por
tanto con un nivel de riesgo de impago superior a la media del resto de
créditos.
Tras el plan de rescate
las bolsas de todo el mundo continuaron su tendencia fundamentalmente bajista.
Luego de varios lunes negros, en los que las bolsas tuvieron caídas históricas,
se hace público que la segunda hipotecaria alemana (Hypo Real Bank) es
intervenida por el Estado para evitar su posible quiebra, con lo que la crisis
financiera estadounidense, generada a partir de ese fenómeno, se extiende a
toda la economía financiera internacional, y se convierte en global.
Con el fin de evitar el pánico bancario en
toda Europa, numerosos gobiernos, como Irlanda, o Portugal se disponen a
garantizar sin límites los depósitos bancarios y a elevar los fondos de
garantía de depósitos hasta 40.000 euros.
Grecia es el país de la
Unión Europea que ha sufrido más duramente la crisis económica. El gobierno
griego había emitido una gran cantidad deuda pública para financiar sus déficits
públicos. El nivel de deuda empezó a resultar preocupante en las primeras
semanas de 2010.
La incapacidad de sus
autoridades de seguir financiando la deuda provocó importantes recortes en el
sector público, que fueron respondidas con manifestaciones públicas y
disturbios desde el comienzo de la crisis.
La crisis se expande a
otras naciones latinoamericanas como Argentina, Haití, Bolivia, Guatemala,
República Dominicana, Honduras, Paraguay, Venezuela, Uruguay, Perú. Las
consecuencias ya la sabemos.
Partiendo del desastre
económicos generado en Estados Unidos, los gobiernos del mundo se han visto en
situaciones difíciles debido al descenso estrepitoso del desempleo, mientras la
población demanda insistentemente soluciones inmediatas a los problemas sociales
que han dado pautas al crecimiento sostenible de la violenta y las protestas
públicas con desenlaces fatales.
Los problemas
financieros han llevado a muchas personas a escoger el camino del suicidio como
solución a los padecimientos y a las impotencias, sobre todo aquellos que no
cuentan con recursos para cubrir la renta o pagar gastos de salud. El desempleo
se asocia a este desenlace, situación que prevalecerá por muchos años en la
medida que el mundo se vaya llenando de humanos y la demanda de alimentos
aumente cada día, del mismo modo que los servicios de salud, educación,
transporte y otros.
En España, país que
registra la peor situación financiera de su historia, los suicidios están
aumentando y son ya la tercera causa de muerte, tras la mortalidad
cardiovascular y el cáncer. En el mundo, el suicidio es la segunda causa de
muerte, tras los accidentes de tráfico, entre los 10 y 24 años. Se puede evitar
la incidencia de esas causas, con el rechazo a las políticas que hacen caer el
sistema de previsión social, la educación, la sanidad, la cultura y el medio
ambiente.
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