! Cosas veredes, Sancho!, es el título del artículo
publicado en el periódico Listín Diario de fecha 17/7/2012, de la autoría del
señor Tony Raful. Tengo que admitir que no he leído El Quijote de la Mancha ni
la Constitución de la República Dominicana, aunque sí la Biblia.
No soy del fan
club de la Asociación de Academias de la Lengua Epañola sino del diccionario
Larousse y la era digital. Por lo tanto, para comprender el
significado del título medieval "Cosas veredes, Sancho", decidí
navegar en el internet (capsuladelalengua.wordpress.com/2008/04/cosas-veredes/)
de donde citamos los siguientes párrafos: (1) “Se ha extendido la
idea de que esta es una cita extraída del Quijote, y su forma completa
sería: "Cosas veredes, Sancho, que farán fablar de piedra", con un
sabor a castellano antiguo de cuando la "h" sonaba como
"f". Y (2): “Como puede observarse, la expresión en realidad era:
"Cosas tenedes…", pero en algún momento de la historia, algún
despiadado distorsionó forma y significado y ahora cuando asombrados vemos
cosas que nos parecen increíbles, podemos exclamar: Cosas veredes! (Fin de la
cita)
Porfiadamente y con porrería, el señor Tony Raful toca
el tema de Rubirosa, esta vez por la designación con el nombre de
Embajador Rubirosa un torneo de Copa de Polo en California. A nuestro modo de
ver, el problema de la promoción del torneo con ese título no radica en el
personaje sino en los millonarios fondos del Ministerio de Turismo
(Mitur) para promover la República Dominicana en el exterior. Al
parecer, el famoso diplomático y playboy no es digno de ser tomado en cuenta en
la aplicación de esos fondos debido al estigma de la Era de Trujillo y los
intentos de hacerla desaparecer de la historia, a lo que el “Jefe” se resiste
desde su tumba gracias a la cantidad de libros publicados después de su
muerte. Por lo tanto, para entender un poco lo del torneo de polo en California
creo que deberíamos colocar a Rubirosa en su justo lugar.
Podría decirse que en su época Rubirosa pudo haber
sido el mayor promotor turístico de la República Dominicana, sin pedir nada a
cambio, con la diferencia de que en el 2012 la República Dominicana cuenta
con unas 70,000 habitaciones hoteleras que cada año hay que llenar con
turistas, que si se repite la historia, Rubirosa hubiera sido la
niña linda de la actual promoción turística oficial (sin objeción alguna), de
la mano con Oscar de la Renta y Julio Iglesias. El Mitur debiera entender el
dicho que reza "todo es válido en la guerra y el amor", el
que también aplica a la promoción del país en el exterior si miramos el lado
positivo de las cosas en sentido general. Si la historia se repite, reitero, de
seguro el periódico español El País publicaría en primera plana las
hazañas del famoso dominicano, tal y como lo hacía la prensa mundial en los
años 40, 50 y 60. Sin embargo, el periódico El País, como afirma Tony Raful,
"dedica una página completa a reseñar la dedicatoria del evento con
el nombre de Rubirosa, destacando las medidas de su órgano sexual, valorando al
embajador no por sus méritos de Embajador, de corredor de autos o campeón de
torneos de polo, sino por su condición de vividor, chulo y excrecencia
social". De haber leído esto en su época, los generales Franco y
Trujillo quizás hubieran sugerido una “peña” entre los medios de comunicación
españoles para discutir la etimología de las palabras "Verga" y
"Bergadano", para llegar a una conclusión del caso, además de la
obvia. Pero hoy soplan otros vientos.
El libro El Quijote de la Mancha se publica a
principios de 1605 y Porfirio Rubirosa nace 304 años después, en 1909. En 1932
Trujillo "lo ficha" en una fiesta en el Country Club, lo invita
a su mesa y luego de una corta conversación lo "engancha" al ejército
para de inmediato formar parte de la Guardia Presidencial, desde donde desafía
a Trujillo rompiendo el protocolo como consecuencia de travesuras relacionadas
con faldas. El tirano se hacía de la vista gorda pero no le perdonó el
"arrebato" del cariño paternal de su mimada hija Flor de Oro,
iniciando una cacería implacable para "llamar a capítulo" al novel
Romeo, algo parecido al capítulo aquel de Petán, el hermano de Trujillo, quién
le tomó prestado al Jefe unos RD$100,000 de su maletín, “sin su permiso”, por
lo que tuvo que asilarse en la casa de Doña Julia (la madre de ambos) para
proteger su vida.
Ante la persecución de su hijo, Doña Ana, madre de Rubirosa, enfrentó a Trujillo
quien al parecer bajó la guardia, agregando, después de un fuerte puñetazo
sobre la mesa…pues que se casen!. Sin conocimiento de causa, Rubirosa rompió
el cerco de protección insinuado por familiares y amigos desafiando así a
Trujillo en su propio terreno, de lo contrario no se consideraba digno del amor
de su hija, para lo cual solo contaba con la mejor de las armas: un inmenso
corazón romántico dentro de su pecho que no solo le servía para oxigenar su
cerebro sino de fuente de inspiración que definiría su particular y exclusiva
manera de vivir (cada cabeza es un mundo), enclavada en el don del amor y la
amistad, independientemente de su intrigante personalidad que llamaba la atención del
sexo femenino, según bibliografía
publicada después de su muerte en 1965.
Hay que admitir que Rubirosa nunca buscó a Trujillo
después de su divorcio con Flor de Oro (ni tampoco a ella), sino todo lo
contrario, seguido de algunos períodos de sequía en los nombramientos
diplomáticos los cuales Rubirosa no rechazaba porque “de pendejo no tenía
nada” ya que los mismos se ajustaban perfectamente a su traje de playboy, el
que le queda grande a la casi totalidad de los seres humanos, con la excepción de
Casanova, Rodolfo Valentino y Carlos Gardel, entre otros. Aún así, las
circunstancias no le impidieron que ordeñara vacas en la finca de su
esposa Danielle Darrieux durante la ocupación alemana en Francia (Segunda
Guerra Mundial). Tiempo después, en uno de sus viajes a Europa, el tirano le
dij "Rubirosa, ya nunca más te vas de mi lado". A partir de la
muerte de Trujillo en 1961 la historia revela que la República Dominicana se ha
convertido en la mejor vaca de ordeño en cada período de gobierno, en
comparación con la gran cantidad de vacas que tuvo el tirano en su régimen de
31 años, lo que convierte al Departamento de Prevención de Corrupción (DEPRECO),
con el respeto que debiera merecernos, en una verdadera mierda de vaca. El
presidente Balaguer dijo en una ocasión que la Constitución de la República era
un "pedazo de papel" y el mundo no se acabó.
Según el artículo "Cosas veredes, Sancho",
el embajador en Cuba, Porfirio Rubirosa, salió de manera irregular de la isla
tras la caída del dictador Batista en enero de 1959 para evitar ser apresado
por el nuevo régimen. Pero de la misma manera, cientos de cubanos han
salido de la isla desafiando los mares y otros peligros poniendo en riesgo sus
vidas para escapar de una dictadura de más de 50 años. La salida de Rubirosa de
Cuba en aquel entonces, como la de muchos otros en ese momento histórico, fué
por puro instinto de conservación, caso contrario a los cubanos que hoy día
dejan la isla en la búsqueda de la libertad. Se puede escribir con tinta china
que la carrera de playboy de Porfirio Rubirosa nada tiene que ver con la
dictadura de Trujillo, o con el orgullo nacional o patriótico, sino mas
bien con su persona y propia forma de vida pués en el fondo Rubirosa también
usó a Trujillo para provecho propio, aunque no lo buscara. Esas eran cosas de
su incumbencia para ver si de una vez por todas se deja de mezclar el agua con
el aceite, o el deporte con la política, como a veces se acostumbra.
Es verdad que Rubirosa introdujo a Ramfis Trujillo en
su mundo mágico, quien quiso aprovechar el legado del playboy para influenciar
a los Kennedy en el levantamiento de las sanciones comerciales que Estados
Unidos y la OEA impusieron a la dictadura por su participación en el atentado
contra el presidente Betancourt de Venezuela, como dice Tony Raful en su artículo.
Pero observe el lector que Rubirosa tuvo los timbales de "acusar a Ramfis
de cobarde y de haberlo dejado actuar como un tonto mientras ganaba tiempo para
la fuga de Santo Domingo, quienes murieron enemigos por esta causa", según
afirma Tony Raful. Esto quiere decir que si el hijo de Pedro María Rubirosa y Doña Ana Ariza no le "comió
cuentos" a Trujillo, mucho menos al débil de carácter Ramfis, quién al
final resultó ser un asesino. Aunque Rubirosa no fue un ejemplo patriótico
dio a conocer nuestro país al mundo. Aún así, la historia comenta casos de
dominicanos "patriotas" que quisieron entregarle "el alma al
diablo" con intentos de anexión del país a potencias extranjeras, al
igual que otros hechos que en el pasado reciente y el presente dejan el tema histórico
muy mal parado. Y mientras a nivel mundial se siga destacando las medidas del
órgano sexual de Rubirosa, "en su justo lugar", jamás se olvidará el
tema musical que se tocaba tan pronto "Rubi" hacía su entrada a los
más prestigiosos night clubs de Europa: "Que será, que será, lo que tiene
Rubirosa".
Pero no todo se reducía a eso, a juzgar por sus
amistades (Trujillo, Ramfis, el Rey Faruk, el príncipe Alex Madivani, John F.
Kennedy, Frank Sinatra y otros), si tomamos en cuenta que a su funeral asistieron
las hermanas del presidente Kennedy, Condes, Barones, duques, artistas de cine,
playboys, modistos, el Príncipe Víctor Manuel de Italia, junto a otras
celebridades que viajaron de diferentes países para darle el último adiós al
dominicano más sobresaliente de todos los tiempos (detodounpoco809.blogspot.com/2007/08/biografia-de-porfirio-rubirosa.html).
Luis Eduardo Díaz Franjul