<P>El doctor Víctor Manuel Peña, economista y catedrático universitario, dijo que en el país se ha hecho, durante décadas, un uso distorsionado y distorsionante de la autonomía y de la discrecionalidad a nivel de la mayoría de las instituciones que tienen estas facultades y prerrogativas. </P>
<P>Apuntó el doctor Peña que por el abuso que se ha hecho de estas facultades, en el decurso del tiempo, las mismas han devenido en privilegios irritantes, si tomamos en cuenta, además, que hay una parte de la población que se consume y languidece en la más indignante pobreza y que el beneficio marginal social, en el caso de algunas de ellas, es menor que el costo marginal social (los beneficios que recibe la población están por debajo de los costos de operación de algunas de esas instituciones).</P>
<P>El doctor Peña acotó que lo anterior significa que es altamente cuestionable hasta la utilidad social de algunas de esas instituciones.</P>
<P>La autonomía administrativa, financiera y presupuestaria que tienen determinadas instituciones no es para que los ¨jefes¨ se enseñoreen y hagan lo que les dé su gana, bajo el absurdo y tiránico criterio de que esas instituciones son fincas o propiedades suyas, y no instituciones públicas que administran y manejan recursos públicos, es decir, recursos que sólo pertenecen a la población, sentenció el doctor Peña.</P>
<P>Consideró el doctor Peña que es hora de que el Congreso de la República comience a legislar sobre la autonomía de esas instituciones estableciendo límites al uso de ésta, al señalar en dichas leyes, de manera expresa, que el uso de la autonomía tiene que ser racional, razonable y apegado a los mejores intereses del país. Y no debe dejarse ningún resquicio para que no haya espacio para el uso de la discrecionalidad.</P>
<P>Finalmente, el doctor Peña declaró que si queremos una sociedad donde haya cierto nivel de equidad social tenemos que seguir enfrentando con responsabilidad y arrojo estos males que nos aquejan.</P>
<P> </P>