El ex candidato vicepresidencial del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), Luis Abinader, propuso que los feminicidios sean declarados como una emergencia nacional y que se adopten medidas extraordinarias para frenar la violencia de género en la República Dominicana.
Comparto esa inquietud, pero lamento que le dé un sazón político a esa epidemia social que avanza sin frenos en todo el país. Eso de lamentar que “las autoridades salientes no hayan actuado con suficiente determinación para enfrentar el problema”, no encaja en este contexto.
Las muertes de mujeres de manos de sus parejas o pretendientes, no es un problema de ahora. Tenemos problemas culturales y de educación que debemos resolver con el concurso de todos los dominicanos.
Es muy fácil dejar esa tarea a los gobernantes de turno, mientras los actores políticos de la acera del frente se frotan las manos y apuestan al fracaso del otro. Hemos sido irresponsables, y todo el tiempo queremos manipular con criterios políticos los hechos que nos rodean. Por eso estamos así y no salimos del atolladero.
En la alta sociedad, también surgen conflictos familiares, y se golpean mujeres, acciones estas que terminan en divorcios, pero los medios de comunicación no se atreven a divulgar esos hechos por temor a demandas.Incluso, hay figuras públicas de esas que a diario vemos en la televisión y en la prensa escrita presentándose como unos angelitos, que también golpean a sus compañeras y las maltratan de palabras. Lamentablemente, son los embajadores de la doble moral.
La violencia familiar no debe confundirse con el feminicidio, que es parte de la violencia familiar.
Los feminicidios no están criminalizados en nuestra legislación. Hay que legislar para penalizarlos. Cuando se mata a una mujer en las circunstancias que explicamos más arriba, es porque han existido los elementos jurídicos que tipifican el hecho en sí: acechanza, premeditación y alevosía
Si es así, entonces habrá que legislar sobre la base de considerar esa acción como un asesinato e imponer 30 años de cárcel a los autores. ¿Cómo calificar el feminicidio?, ¿como un homicidio?
Y si es la mujer que mata al hombre por asuntos pasionales, ¿cómo se le llamaría a esa acción criminal?
Lo cierto es que, (y en eso estoy de acuerdo con Luis Abinader), hay que prestar atención a este flagelo social que está dejando mucho luto, dolor, a muchos niños huérfanos y enemistad en las familias.
Si los problemas políticos y de otra naturaleza se resuelven a través del Diálogo Nacional, ¿por qué no convocar también a un Diálogo Nacional para analizar el fenómeno, con la participación de todos los sectoresque inciden en la vida pública?
¿Vamos a esperar que los feminicidios se conviertan en una peligrosa costumbre, que impere el caos, y que no haya remedio para la enfermedad, para entonces actuar?
Noto que existe una rebeldía contra la ley de parte de los hombres que asesinan a sus parejas, al extremo que muchas órdenes de no acercamiento dictadas por el ministerio público, se violan con frecuencia, según se ha denunciado en algunos de los casos que se han dado.
Si esa así, entonces estamos frente a una situación grave en la cual los representantes de lajusticia y la Policía Nacional tienen que emplearse a fondo para hacer cumplir las leyes.