La
corrupciónen el Estado no fue inventada
por elPartido de la Liberación
Dominicana, pero los dirigentes de esa organización acumulan el mayor mérito en el auge,
desarrollo y secularización del enriquecimiento ilícito. Sus doce años de
gobierno superan suficientemente los otros doce años – los de Balaguer- , y
permitenque el PLD sea coronadocampeón en la materia.
La
depravaciónen el manejo de los
recursospúblicos ha alcanzado niveles
tales, que unfiscalinició la clasificación de los corruptos. El
señor Hotoniel Bonilla llamó “corrupto consuetudinario” a otro servidor público
cuya conducta ha sido seriamente cuestionada, pero que el presidente Fernández
siempre lo quiere en su administración.
Si
existe el corrupto consuetudinario- también llamado patológico- , ha de haber
unocasional, ya que hay una relación de
antonimia entre estas palabras. El ocasional quizá se atiene a lo que le
deparen las circunstancias, no anda inventando cómo robar, sino que lo hace
cuando se lo ponen fácil. Se parece al corrupto moderado, aunque depende de los
montos envueltos en sus acciones.
Hay
corruptos solitarios y corruptos asociados. El primero es una especie escasa, pues por lo común los
fraudes al erario requieren de un cómplice. El asociado es más frecuente. Unos tipos de corruptos no son exclusivos
del PLD. El institucional, por ejemplo,
quiendesde la cúpula de un partido
regala o negociacargos electivos a
extraños, mientras el corrupto transgénico se va con el cargo (legislador,
alcalde, edil…) para otra organización.
Hay
corruptosdisimulados. Es el caso
delos fiscales y procuradoresadjuntosque elaboran expedientes insulsos a favor de delincuentes que han comprado
su libertad. Esta acción conllevadesaparecer cuerpos del delito en lo que ayudan oficiales de la Policía.
Gracias a ellos tantos bandidosandan
libres y la inseguridad es una de las principales preocupaciones de los
dominicanos.
En
contraposición al disimulado, tenemos al corrupto ostentoso. A este no le
importa que se sepa en lo que está,exhibe sus riquezas y bonanzas, compra villas,mansiones y vehículos de lujo, costea
megadivas, adquiere empresas y no le preocupa que digan que hace ocho añosvivía en un barrio modesto y recibía ayuda de
amigos para comer o transportarse.
Algún
parecido con el anterior guarda el corrupto empoderado. Con ladiferencia de que éstemás queostentarriquezas, lo que
hacees erguir su pecho y con airedesafiante rechazar losvicios que le enrostran y persistegallardamente en su presunta honradez.Alega que ha hecho fortunacon el trabajo o que es rico de familia.
Caso
llamativo es el del corrupto pontificante.Este señor habla en forosdiversos sobre políticas e
iniciativas anti corrupción. Critica la prevaricación, pero no explica cómo ha
podidoacumular tantariqueza. Este espécimenno es numeroso, como tampoco lo es el
corrupto calculador, que concibe acciones que conllevan planificación de las
engañifas al Estado.
Ambos
tipos son más peligrosos que el corrupto demencial. Éste sobresaleporactos dirigidos a satisfacer su paranoia (el despacho, elgran ascensor…). Como nada es estático,
lacorrupción crece y se expande. Ahora
el PLDlaexportay con ello crea un nuevo tip el corrupto internacional.
Falta
anotar que en pro de la equidad de género, donde dice corrupto debeleerse también corrupta. El cuadro descrito
sugierela existencia de un tipo
adicional: el corrupto por omisión, que se limita a tipificarlos, pero que no
mueve una paja para perseguirlos.Son
méritos del PLDy su gobierno.