El maestro José Antonio Molina, dirigió una Orquesta Sinfónica Nacional que hizo historia al subir por primera vez al escenario del Aula Magna de 472 años de existencia, para deleitar a los responsables de impartir cada día el pan de la enseñanza, comprometidos con el servicio a la Patria más que con cualquier compensación económica.
Como parte del acto, el rector Mateo Aquino Febrillet, los miembros del Consejo Universitario y el presidente de la Federación de Asociaciones de Profesores de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, FAPROUASD, Ismael Peralta, rindieron honor especial a nueve académicos, declarándolos "Profesores del Año" en sus respectivas facultades.
Se trata de los maestros Oscar Diloné Mendoza, Facultad de Humanidades; Elsa Beatriz Culó, de Ciencias; Ana Victoria Peña, de Ciencias Económicas y Sociales; Ricardo Valdez Araujo, de Ciencias Jurídicas y Políticas, y Cervantes Hernández García, de Ingeniería y Arquitectura.
También Esperanza Ferreras, de la Facultad de Ciencias de la Salud; Bolívar Toribio, de Ciencias Agronómicas y Veterinarias; Alfredo Fernández, de Artes, y Elida Jiménez Victorio, de Ciencias de la Educación.
El rector de la UASD, Aquino Febrillet entregó una placa de reconocimiento y un lector digital (IPod), a los maestros distinguidos como "Profesores del Año".
Luego les felicitó por la conmemoración del "Día del Maestro" y aprovechó la ocasión para convocar a la unidad de los sectores que componen la familia universitaria.
Al secretario general de la UASD, doctor Santo Inocencio Mercedes, le correspondió la lectura del certificado de reconocimientos a los maestros homenajeados.
La Orquesta Sinfónica
El maestro José Antonio Molina, quien dijo tener una deuda de gratitud con la UASD, academia que le otorgó un Doctorado Honoris y Causa hace tres años, entregó a nombre de la Orquesta Sinfónica una placa de reconocimiento a la Universidad Primada en la persona del rector Aquino Febrillet.
De su lado, la máxima autoridad universitaria entregó al maestro Molina una estatuilla en reciprocidad por el honor de trasladar la Orquesta Sinfónica de su tradicional escenario del Teatro Nacional hacia el Aula Magna para deleitar en la mejor expresión de su lírica a los maestros de la UASD.