"No creo que esté claro quien gana, pero son dos buenas opciones con distintos riesgos y beneficios", dijo el doctor Scott Lippman, un especialista en cáncer del Centro M.D. Anderson de la Universidad de Texas.
Lippman es el editor de Investigación para la Prevención del Cáncer, una revista especializada que publicó hoy los resultados a largo plazo del estudio, financiado por el gobierno federal.
Tamoxifen se usa mucho para tratar el cáncer una vez que es diagnosticado y Evista es usado para la osteoporosis. Hasta el momento, sin embargo, los medicamentos no son populares para prevenir el cáncer. Los médicos esperan que los resultados del estudio animen a más mujeres en riesgo a consumirlos.
Estos tratamientos no se recomiendan para mujeres que tienen un riesgo promedio de desarrollar la enfermedad, pero sí para las millones de mujeres que tienen un alto riesgo de padecerlo debido a mutaciones genéticas, antecedentes familiares y otros factores. En esos casos, la diferencia puede ser significativa.
Tamoxifen reduce a la mitad el riesgo de desarrollar las formas más severas del cáncer de mama, según el estudio, pero con un riesgo más alto de cáncer uterino. Evista disminuye en un 38% el riesgo de cáncer, con menos problemas uterinos y otros efectos secundarios considerables.
Ahora hemos documentado que es mucho menos tóxico que tamoxifen, dijo el investigador principal del estudio, el doctor D. Lawrence Wickerham, quien es un especialista en cáncer en el hospital general Allegheny en Pittsburgh. El experto ha sido consultado por las farmacéuticas productoras de las dos medicinas.
El estudio, llamado STAR, comparó el efecto de los medicamentos en 20.000 mujeres posmenopáusicas con un alto riesgo de cáncer de mama.
Calculadora de riesgo de cáncer:
http://cancer.gov/bcrisktool