FACTORES DE RIESGO:
El consumo bajo de líquidos aumenta enormemente las posibilidades de desarrollar cálculos, por esta razón, con frecuencia se les aconseja a los individuos con riesgo de desarrollar esta patología que ingieran mucho agua, infusiones y jugos. etc.
Los altos consumos de sodio y proteínas (particularmente las proteínas animales) también pueden aumentar el riesgo de desarrollar cálculos de oxalato de calcio, aunque ciertos estudios que sustentan que no producen estos efectos.
Los alimentos ricos en oxalato, tales como la espinaca y el cacao también pueden aumentar el riesgo de desarrollar cálculos.
TRATAMIENTO:
El tratamiento convencional para los cálculos renales varía de acuerdo a su ubicación, síntomas y composición química. Aquellos que causan problemas pueden ser tratados con "litotricia extracorpórea por onda de shock," una técnica que puede romperlos desde el exterior del cuerpo, permitiéndoles salir más fácilmente. Sin embargo, ocasionalmente, la cirugía puede ser necesaria.
TRATAMIENTOS NATURALES PROPUESTOS:
El citrato o ácido cítrico, es un componente ordinario de nuestra dieta, presente en cantidades altas en las frutas cítricas. El citrato se combina con el calcio en la orina, reduciendo de ese modo la cantidad de calcio disponible para formar cálculos de oxalato de calcio. También previene que cristales pequeños de oxalato crezcan y se agrupen en cálculos más grandes. Finalmente, hace que la orina sea menos ácida, lo cual inhibe tanto el desarrollo de cálculos de oxalato de calcio como de ácido úrico.
Un estudio del Centro Médico de la Universidad de Southwestern, de Texas, halló que el jugo de naranja es mejor que la limonada y otros jugos cítricos para controlar los cálculos renales. Los investigadores hallaron que el jugo de naranja aumenta el nivel de citrato en la orina y reduce la cristalización del ácido úrico y el oxalato de calcio, los componentes más comunes del cálculo renal. Pero la limonada no aumenta los niveles de citrato.
La jefa del estudio, publicado por el Clinical Journal of the American Society of Nephrology, Dra. Clarita Odvina, indicó que el citrato que contienen la naranja y la toronja trae un ión de potasio, mientras que el citrato en la limonada y del arándano trae un ión hidrógeno, que contrarresta los beneficios del potasio.