NUEVA YORK.-La mitad de las deportaciones de dominicanos de agosto del 2004 a julio del 2006 se deben al tráfico de drogas, hechos que son cometidos mayoritariamente por hombres de acuerdo a declaraciones del director de migración del país, Carlos Amarante Baret
Según los datos de la Dirección General de Migración, 1,444 dominicanos fueron repatriados por casos de drogas, asalto, robo, agresión sexual, violencia, homicidio, fraude, armas ilegales y por su estatus migratorio, entre agosto y diciembre del 2004.
Las estadísticas revelan que 1,228 eran hombres y 221 mujeres y que un 49 por ciento de las deportaciones fueron por drogas.
Al año siguiente, el 2005, las cifras de repatriados se triplicaron respeto al año anterior, registrándose 5,028 deportados, e igualmente, los hombres (4,687) volvieron a encabezar el número mayor de los devueltos a su país, tras cumplir sentencias en EEUU.
Las drogas, con el 46,94 por ciento de los casos, fueron la razón principal de las repatriaciones y el 35,96 por su situación migratoria.
De enero a julio del presente año, han sido devueltos a la República Dominicana 2,131 connacionales, de los cuales 1,958 son hombres y 173 féminas.
Según el delito en el 2006 un total de 915 casos fue por droga, 827 por ser indocumentados, seguidos por 106 que cumplieron sentencias por robo.
Unos 5,000 dominicanos cumplen sentencias en diversas prisiones de la nación. Se estima que el mayor número de las deportaciones son de Nueva York, donde vive el mayor número de quisqueyanos fuera de su país.
"De la ciudad de Nueva York llega un vuelo todas las semanas", dijo a Efe Amarante, quien viajó a la ciudad para sostener un encuentro con líderes de la comunidad y funcionarios elegidos, sobre diversos temas, entre éstos, las deportaciones "que dividen a muchas familias".
Amarante Baret llamó la atención de que muchos dominicanos viven en Nueva York desde su niñéz, por lo que mostró esperanza que las autoridades migratorias de este país tomen en cuenta esa realidad cuando toman sus decisiones.
"Tenemos jóvenes que llegaron aquí (EEUU) cuando eran unos niños y no tienen ningún tipo de raíz en la República Dominicana, que no haya sido un viaje de vez en cuando. Esperamos que en algún momento las leyes migratorias puedan contemplar esa realidad", comentó a EFE el director de migración dominicano.
Admitió que todavía las autoridades de República Dominicana no han creado ningún programa que les permita enviar a los usuarios de drogas a rehabilitación tan pronto llegan al país.
No obstante, aseguró que varias organizaciones no gubernamentales han hecho un acercamiento a la agencia que dirige y la Dirección Nacional de Control de Drogas para iniciar un programa de orientación y reinserción social "de estos compatriotas que necesitan algún tipo de orientación del estado dominicano, que hasta ahora no se le está dando".
"Estamos tratando de colaborar con las organizaciones porque no tenemos la capacidad ni física ni presupuestaria para poder hacernos cargos de la rehabilitación", argumentó.
Explicó que los deportados son recibidos por personal de la Dirección General de Inmigración, confeccionándose una especie de registro de los que cometieron delitos graves en EEUU, que son "observados por las autoridades del país".
"Los organismos de seguridad tienen control de los que son repatriados por delitos mayores", aseguró el funcionario, quien rechazó que los deportados sean los causantes de la ola de violencia que afecta el país y que llevó al presidente Leonel Fernández a militarizar sus calles.
Amarante aseguró que sólo un cinco por ciento de los deportados, según estadísticas de la Policía, están involucrados en acciones criminales.
"Eso quiere decir que el 95 por ciento lo que hace es que se reinserta a su comunidad, trabaja y no delinque", afirmó y acto seguido aseguró que en su país, "la ola de delincuencia tiene de los índices menores en América".
"Somos un país seguro y evidentemente tenemos problemas pero se trazó un plan dirigido a que el terreno sea menos fértil para la criminalidad"sostuvo Baret
dtg