Kiev se enfrenta a un "plan de 28 puntos" que exige dolorosas concesiones territoriales y militares a Rusia.
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, admitió este viernes que su país atraviesa uno de los momentos más delicados de sus casi cuatro años de resistencia. La encrucijada se presenta tras recibir, apenas el día anterior, una propuesta de Estados Unidos —supuestamente impulsada por la administración Trump— para intentar poner fin a la guerra desatada por la invasión rusa en febrero de 2022.
En un discurso a la nación, Zelenski fue dramático al describir la presión: "Ahora Ucrania se enfrenta a una decisión muy difícil: perder su dignidad o un socio clave. Aceptar los difíciles 28 puntos o afrontar un invierno extremadamente duro y otros riesgos".
El mandatario reconoció que Washington está esperando una respuesta formal. Ante este escenario, Kiev ha optado por una estrategia de réplica, buscando argumentos sólidos y ofreciendo "alternativas" al plan estadounidense. Zelenski fue enfático en su límite: no dará "al enemigo motivos para decir" que es Ucrania la que "no desea la paz, la que obstaculiza el proceso y la que no está preparada para la diplomacia".
Concesiones imposibles en el plan de 28 puntos
El plan de paz de 28 puntos, cuyos detalles han sido ampliamente difundidos por medios estadounidenses, contiene epígrafes considerados inaceptables por Kiev. Entre ellos destacan la exigencia de ceder a Rusia gran parte de la región oriental del Donbás, territorio que ya está bajo ocupación rusa, y la necesidad de reducir sustancialmente las capacidades y el tamaño de las Fuerzas Armadas ucranianas.
Para Zelenski, el debate no es solo estratégico, sino existencial: "Lucharé incansablemente para que, entre todos los puntos del plan, no se pasen por alto al menos dos: la dignidad y la libertad de los ucranianos." El presidente subrayó que todo lo demás —la soberanía, la independencia y el futuro de la nación— se basa en esos principios irrenunciables.
El apoyo europeo, un baluarte
Pese a la intensa presión de su socio transatlántico, Zelenski afirmó que el país cuenta con el apoyo incondicional de los países europeos. Estos aliados, según el líder ucraniano, "comprenden que Rusia no está lejos, que está cerca de las fronteras de la Unión Europea".
El discurso sirvió también como recordatorio del sacrificio que ha hecho Ucrania: "Hemos resistido durante casi cuatro años la invasión a gran escala de uno de los ejércitos más grandes del mundo." La línea de frente se extiende por miles de kilómetros y el pueblo sufre bombardeos, ataques balísticos y atentados suicidas cada noche, perdiendo seres queridos a diario.
Zelenski concluyó su mensaje con la dolorosa realidad de su pueblo: "Nuestro pueblo realmente desea que la guerra termine," pero no a cualquier costo. La diplomacia ucraniana se prepara ahora para negociar las condiciones del fin del conflicto, intentando no sacrificar sus principios fundacionales por la necesidad de ayuda militar.Con datos de Euroipa Press

