Dos tribunales condenan a 30 años a ladrones y empleados homicidas en casos capitales
SANTO DOMINGO. La justicia dominicana ha emitido un desenlace contundente contra la criminalidad, imponiendo la pena máxima de 30 años de prisión a cuatro hombres en dos sentencias separadas por crímenes de alto impacto. En Puerto Plata y el Distrito Nacional, los tribunales respondieron con la severidad que exigen los asesinatos perpetrados con alevosía y saña.
El doble crimen de Puerto Plata: traición y fuego
El Tribunal Colegiado de Puerto Plata dictó la máxima condena posible contra Juan Alberto Perdomo y Manuel Francisco Pichardo, dos hombres que convirtieron la confianza de su empleador en un plan macabro.
Perdomo y Pichardo trabajaban para el ganadero Eduardo Generoso Pérez en Estero Hondo, Villa Isabela. Aprovecharon esa posición para sustraer y vender, en beneficio propio, decenas de reses. Cuando el ganadero descubrió el robo y los enfrentó, la respuesta de sus empleados fue brutal: planificaron y ejecutaron el asesinato de Pérez y de su compañera sentimental, Maribel del Carmen Acosta.
La crueldad del crimen fue expuesta por la Fiscalía: los agresores golpearon a la pareja con palos y una llave de hierro para tuberías antes de quemar sus cuerpos dentro de la finca, intentando borrar todo rastro.
La burda simulación continuó incluso después de los asesinatos. Los condenados sustrajeron los teléfonos de Pérez y Acosta y enviaron mensajes a sus familiares, haciendo creer que la pareja aún estaba con vida, mientras seguían vendiendo el ganado robado.
La Fiscalía litigante, con la participación esencial del procurador general de corte Miguel Antonio Ramos y un equipo de fiscales, logró demostrar la culpabilidad más allá de toda duda razonable.
La prueba incluyó los restos óseos incinerados de las víctimas, las herramientas homicidas, ropa manchada de sangre y un DVR dañado que pretendía eliminar las evidencias.
El tribunal ordenó que Perdomo y Pichardo cumplan su sentencia en el CCR San Felipe, además de pagar una indemnización a los familiares de las víctimas.
Asalto fatal en el Distrito Nacional
En un segundo caso de robo que escaló a homicidio, un tribunal del Distrito Nacional sentenció también a 30 años de prisión a Diego Alberto Gómez Castillo y Nicole Cruz Rodríguez.
Los dos asaltantes fueron hallados culpables de interceptar y matar a Creylin Radhamés Ramírez Pujols en el sector Los Peralejos. El expediente de la Fiscalía detalla que Gómez Castillo y Cruz Rodríguez persiguieron a la víctima y a su pareja en motocicletas mientras regresaban a su hogar.
Cuando los asaltantes les cerraron el paso, la pareja intentó escapar. Ramírez Pujols aceleró su motocicleta, un acto de desesperación que le costó la vida: uno de los condenados disparó dos veces, impactándolo y provocando su caída fatal cerca de su residencia.
La fuerza de la prueba radicó en la tecnología. Las cámaras de seguridad captaron con claridad la persecución y el momento del ataque, además de confirmar la ruta de huida. Testigos presenciales identificaron a la pareja de asaltantes, quienes habían merodeado el colmado donde se encontraba la víctima momentos antes del crimen.
Los delitos, que incluyeron asociación de malhechores, homicidio y tentativa de robo, llevaron a Gómez Castillo a La Victoria y a Cruz Rodríguez a Najayo Mujeres para cumplir la condena.

