Edesur, Edenorte y Edeeste se elogian por la "rápida y efectiva" respuesta al blackout nacional.
SANTO DOMINGO. — Tras el masivo blackout que paralizó al país este martes, las empresas distribuidoras de electricidad (EDE), Edesur, Edenorte y Edeeste, han emitido un comunicado conjunto para destacar lo que consideran una "rápida y eficiente respuesta" del sector, que permitió normalizar el servicio en un tiempo relativamente corto.
Las EDE reconocieron y valoraron públicamente la acción de la Empresa de Transmisión Eléctrica Dominicana (ETED) ante la contingencia. El evento, que se originó a partir de una falla técnica en la subestación de San Pedro de Macorís, provocó la salida en cadena de varias plantas de generación, sumiendo a toda la República Dominicana en la oscuridad.
Según el comunicado, la pronta intervención del personal técnico de ETED fue crucial para resolver la dificultad inicial, restablecer la estabilidad del sistema e iniciar de inmediato el proceso de reconexión de las unidades generadoras.
El orgullo del operativo
El autoelogio no se limitó a la empresa de transmisión. Las distribuidoras extendieron un reconocimiento especial a sus propios equipos de trabajo, cuyo "trabajo continuo y comprometido" fue clave para normalizar los circuitos y devolver la electricidad a los usuarios en el menor tiempo posible.
"Su dedicación refleja la fortaleza operativa y la vocación de servicio que caracterizan al sector eléctrico", afirma el texto, buscando proyectar una imagen de solidez institucional ante la ciudadanía, que ha estado lidiando con una creciente inestabilidad en el servicio.
Además de valorar la labor interna, las EDE elogiaron la transparencia y oportunidad de la información suministrada por los organismos del Gobierno durante y después del incidente. Esto, según las empresas, fue fundamental para "fortalecer la confianza" en las instituciones del Sistema Eléctrico Nacional.
El comunicado concluye con la promesa de rigor: las empresas reiteraron su compromiso de seguir trabajando de manera coordinada con todos los actores del Sistema Eléctrico Nacional Interconectado (SENI) para asegurar un servicio más estable, confiable y de calidad.
En esencia, el sector ha pasado de la crisis al aplauso, buscando minimizar el impacto del blackout y reforzar la percepción de que, a pesar de la falla, la respuesta fue ejemplar.

