Alcaldesa de Santo Domingo llama a enfrentar el cambio climático desde las ciudades
Desde Buenos Aires, en el marco de la XXI Asamblea General de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas (UCCI), la alcaldesa del Distrito Nacional, Carolina Mejía, puso sobre la mesa un tema que, tras el paso de la tormenta tropical Melissa por República Dominicana, se ha vuelto urgente: la necesidad de construir viviendas resilientes como política regional para proteger a los ciudadanos frente al cambio climático.
Mejía, quien también ocupa la vicepresidencia regional de Política Social y Bienestar de la UCCI, planteó que la resiliencia urbana no puede seguir siendo una aspiración lejana. “No se trata solo de resistir el impacto de un evento climático, sino de actuar colectivamente, aprender y levantarse más fuertes”, expresó ante sus homólogos de 21 ciudades iberoamericanas reunidos en La Usina del Arte, epicentro de la cooperación urbana en esta edición.
La alcaldesa dominicana insistió en que la resiliencia es una construcción colectiva que involucra coordinación institucional, preparación técnica, conciencia ciudadana y solidaridad comunitaria. “Cada peso invertido en prevención y resiliencia ahorra hasta cuatro en reconstrucción”, afirmó, citando estudios internacionales que respaldan su enfoque.
Durante el panel “2026 Iberoamérica rumbo a la XXX Cumbre Iberoamericana de Madrid”, Mejía compartió escenario con figuras como José Luis Martínez-Almeida, alcalde de Madrid; Jorge Macri, jefe de Gobierno de Buenos Aires; y Andrés Allamand, secretario general iberoamericano de SEGIB. Allí, defendió que las ciudades deben ser protagonistas en la construcción de una agenda regional que responda a las verdaderas necesidades de la gente.
“Una política de resiliencia debe ser, ante todo, una política de cercanía. Debe nacer en el territorio, escuchar a la gente y adaptarse a sus realidades”, dijo, subrayando que Santo Domingo está apostando por una ciudad más humana, inclusiva y moderna, capaz de articular esfuerzos con distintos niveles de gobierno y con la sociedad civil.
En otro panel titulado “Innovación social y gestión urbana de la vulnerabilidad”, Mejía compartió ideas con los alcaldes Mario Desbordes (Santiago de Chile), Miguel Romero (San Juan, Puerto Rico) y Jorge Aldana (Tegucigalpa), reforzando la idea de que la innovación social debe estar al servicio de quienes más lo necesitan.
La asamblea, que se celebra cada dos años, reunió a líderes de ciudades como Lima, Montevideo, Quito, San Salvador, Bogotá, Lisboa, Ciudad de Panamá, La Habana, Brasilia y São Paulo, entre otras. Bajo el lema “Ciudades Iberoamericanas: talento que transforma, innovación que impulsa”, se reafirmó el compromiso de los gobiernos locales con un futuro urbano sostenible.
En este contexto, la participación de Carolina Mejía no solo posiciona a Santo Domingo como un actor relevante en la región, sino que también refleja el tipo de liderazgo que busca transformar los desafíos climáticos en oportunidades para construir ciudades más seguras y equitativas.
La propuesta de incluir las viviendas resilientes en la agenda regional de la UCCI no es una simple declaración: es un llamado a la acción. Porque, como bien dijo la alcaldesa, el cambio climático ya no es una amenaza futura, sino una realidad que golpea todos los días, y las ciudades deben estar preparadas para resistir, adaptarse y prosperar.
