Pese a la movilización militar y el pánico ciudadano, el ministro Sturge desmiente planes hostiles con Venezuela.
Santo Domingo, domingo 2 de noviembre. La incertidumbre que se apoderó de de Trinidad y Tobago en las últimas 24 horas pareció disiparse, al menos en el discurso oficial, luego de que el ministro de Defensa, Wayne Sturge, negara categóricamente que la nación se encuentre en estado de alerta máxima frente a cualquier tipo de operación militar u hostilidad con la vecina Venezuela.
"No hay estado de alerta máxima con respecto a ninguna operación militar ni a ninguna hostilidad en los países vecinos. Espero que esto ponga fin al pánico innecesario", declaró Sturge al periódico Newsday vía WhatsApp el sábado 1 de noviembre, en un intento por calmar a una población visiblemente nerviosa.
La declaración del ministro se produce un día después de una movilización obligatoria de todo el personal militar en servicio activo y una directiva policial que restringió los permisos a todos los agentes.
Fuentes de alto rango en las Fuerzas de Defensa de Trinidad y Tobago confirmaron que el 31 de octubre se instruyó a soldados, marineros y oficiales a presentarse "inmediatamente" en sus estaciones para recibir instrucciones de sus comandantes.
Esta serie de movimientos militares coincidió con informes de medios internacionales que especulaban con una supuesta preparación de Estados Unidos para atacar objetivos terrestres en Venezuela.
Aunque el presidente estadounidense, Donald Trump, ha negado tales planes, la conjunción de noticias y acciones locales disparó una ola de pánico: supermercados se vieron abarrotados, las gasolineras registraron largas colas y el tráfico colapsó en distintos puntos del país.
El eco de la inquietud resonó hasta el Parlamento, donde la primera ministra Kamla Persad-Bissessar declaró a la prensa no haber recibido informes de inteligencia sobre ningún plan de ataque militar en la región, en un esfuerzo directo por calmar la creciente ansiedad pública.
A nivel internacional, el propio Donald Trump desmintió haber tomado la decisión de atacar a Venezuela. El secretario de Estado, Marco Rubio, incluso compartió un reportaje del Miami Herald sobre el supuesto ataque, señalando al periódico que sus "fuentes" habían sido engañadas al publicar una "noticia falsa". La Embajada de Estados Unidos en Puerto España reforzó este mensaje compartiendo en su página de Facebook una publicación con un video del presidente Trump negando la veracidad de los reportes.
La mañana del día anterior había estado marcada por una palpable ansiedad ciudadana. El periódico Express verificó la existencia de una circular que, a media mañana, pedía al personal "prepararse para presentarse en la oficina si se les requiere hoy". Con la aclaración de Sturge, el gobierno busca ahora apaciguar las aguas y restablecer la normalidad en medio de la volatilidad regional.
