Una activa onda tropical y una vaguada prolongarán los aguaceros, con posibles inundaciones en varias provincias.
No da tregua. El cielo plomizo y el rumor constante de los aguaceros seguirán siendo el paisaje sonoro y visual de gran parte del país durante las próximas 48 horas. La combinación de una onda tropical, que se desplaza rápidamente hacia el oeste, y una vaguada en altura está actuando como un motor de inestabilidad atmosférica.
El resultado es un patrón de lluvias que no se irá tan pronto. Para esta tarde y noche, se prevén aguaceros de moderados a fuertes, algunos con tormentas eléctricas y ráfagas de viento significativas. El litoral Caribeño, el noreste, el sureste y la cordillera Central están en la mira del sistema. Provincias como La Altagracia, Santo Domingo, San Cristóbal, La Vega y Santiago están entre las que recibirán los mayores acumulados de agua.
La situación se repetirá mañana domingo. La onda tropical estará directamente sobre el territorio nacional, interactuando con la vaguada para generar otra ronda de chubascos intensos durante la tarde.
Las zonas de mayor impacto serán similares, extendiéndose también hacia provincias del suroeste como Barahona y Pedernales. Los meteorólogos esperan que la actividad disminuya, aunque no cese por completo, en las primeras horas de la noche del domingo.
Frente a este pronóstico, la Oficina Nacional de Meteorología ha ajustado los niveles de aviso y alerta. El llamado es a la ciudadanía, especialmente en sectores vulnerables. El riesgo principal son las inundaciones repentinas en zonas urbanas y rurales, los desbordamientos de ríos y cañadas, y posibles deslizamientos de tierra en laderas inestables.
Las autoridades recomiendan evitar cruzar ríos crecidos y asegurar objetos en techos y patios que puedan ser proyectados por las ráfagas de viento. La población debe mantenerse informada a través de los canales oficiales.

