El desbordamiento del río La Digue en Petit Goâve causa estragos; diez desaparecidos.
La peor cara del huracán 'Melissa', aunque no impacte de lleno, se está sintiendo con brutalidad en Haití. Los efectos del temporal de viento y lluvias han provocado la crecida repentina de un río en la zona sur del país, dejando un saldo trágico de, al menos, 20 personas fallecidas. Lo más desgarrador del balance es que diez de las víctimas confirmadas son menores de edad.
El panorama se agrava con la confirmación de otra decena de personas desaparecidas, según el recuento provisional de las autoridades locales.
Emmanuel Pierre, director general de Protección Civil, confirmó las cifras al periódico Le Nouvelliste, advirtiendo que se trata de un balance "provisional" debido a que los equipos de rescate y las comunidades "continúan las búsquedas" de personas arrastradas por la corriente.
El desastre ocurrió de madrugada, cuando el río La Digue se desbordó a su paso por la localidad de Petit Goâve, ubicada en el departamento Oeste. El caudal repentino no solo anegó las calles adyacentes, sino que avanzó con la fuerza suficiente para arrasar con viviendas y vehículos, muchos de los cuales fueron sorprendidos por la noche, convirtiendo el amanecer en una escena de devastación.
Efectos colaterales de un huracán de categoría cinco
’Melissa' se convirtió en un monstruo meteorológico, llegando a alcanzar la categoría cinco en la escala Saffir-Simpson y dejando a su paso, al menos, tres muertos en Jamaica antes de tocar tierra este miércoles de madrugada en Cuba. Desde la isla caribeña, el presidente Miguel Díaz-Canel, ya ha confirmado "cuantiosos" daños materiales.
Haití no se encontraba directamente en la ruta de impacto del huracán, pero la advertencia de la ONU sobre el potencial destructivo de sus efectos colaterales resultó ser acertada. La nación, por su alta vulnerabilidad, es históricamente una de las más afectadas por este tipo de fenómenos.
El Centro Nacional de Huracanes (CNH) de Estados Unidos ha pronosticado que las condiciones propias de una tormenta, que incluyen vientos fuertes y lluvias torrenciales, persistirán a lo largo de todo el día en el territorio haitiano.
La persistencia del temporal mantiene en máxima alerta a Protección Civil, que teme que las continuas lluvias puedan provocar nuevos deslizamientos de tierra y crecidas de ríos en las zonas montañosas y densamente pobladas del país.
La comunidad internacional sigue de cerca la evolución del desastre, a la espera de peticiones formales de ayuda para asistir a las familias afectadas por la riada en la empobrecida nación caribeña. Con datos de Europa Press

