La pareja de la víctima, herido e ingresado, es el principal sospechoso del crimen en el Distrito Nacional
SANTO DOMINGO.— La mañana de este viernes se tiñó de tragedia y horror en el sector de Guachupita, Distrito Nacional, tras el hallazgo del cuerpo sin vida de una joven dentro de su propia residencia. Elianny Rodríguez Puello, de tan solo 21 años, fue encontrada con múltiples heridas de arma blanca, un indicio escalofriante de la violencia que acabó con su vida.
La Policía Nacional, que confirmó el suceso, ha señalado de inmediato a la pareja sentimental de la víctima, José Luis Viloria de Jesús, de 29 años, como el presunto autor de este feminicidio. El hecho, cuyas circunstancias exactas aún se encuentran bajo una intensa investigación, tuvo lugar en la vivienda ubicada en la calle Francisco del Rosario Sánchez No. 87.
Según los reportes preliminares, el suceso ocurrió en la parte posterior de la casa, en un punto cercano a la conocida zona de La Metalera. El cuerpo de Rodríguez Puello presentaba diversas laceraciones provocadas por un arma punzocortante, lo que sugiere un ataque brutal y directo.
Del agravio al intento de suicidio
El drama no terminó con el crimen. Tras el presunto asesinato, Viloria de Jesús intentó poner fin a su propia vida. Utilizando, al parecer, la misma arma empleada contra su pareja, el hombre se infligió graves heridas cortantes en el cuello.
Esta acción lo condujo de inmediato al Hospital Moscoso Puello, donde actualmente está recibiendo atención médica. Sin embargo, su estado de salud no ha evitado que quede formalmente bajo custodia policial. Un agente permanece vigilando al sospechoso en el centro médico, asegurando que no se sustraiga de la justicia una vez sea dado de alta.
El caso ha sido asumido por el Departamento de Homicidios de la Policía Nacional. Los investigadores están trabajando en coordinación estrecha con el Ministerio Público para desentrañar el móvil exacto que desencadenó esta espiral de violencia. La prioridad ahora es recabar todas las evidencias necesarias, desde testimonios de vecinos hasta el análisis forense de la escena, para completar el expediente y formalizar las acusaciones legales correspondientes.
Este tipo de tragedias, que se repiten con una frecuencia alarmante en el país, pone de nuevo el foco en la urgencia de fortalecer las medidas de protección y la educación contra la violencia de género.
La comunidad de Guachupita, mientras tanto, llora la pérdida de Elianny, una vida joven arrebatada de forma violenta en el espacio que debería haber sido el más seguro: su propio hogar.

