La firma dominicana de mobiliario presenta su rebranding en Deco Expo 2025, marcando una nueva era.
Santo Domingo.- En el bullicio creativo de Deco Expo 2025, entre stands que exhibían las últimas tendencias en decoración, ocurrió algo más significativo que el lanzamiento de un nuevo producto. Arbaje Soni, un nombre que por más de seis décadas ha amueblado la memoria afectiva de los hogares dominicanos, se presentó con un rostro completamente renovado. No se trataba de una simple actualización de logo, sino de la reafirmación de una evolución que ya estaba en marcha.
El rebranding nace de una visión generacional. Verónica Madera, representante de la tercera generación al mando, identificó que una marca con tanta historia necesitaba un lenguaje visual acorde con su presente. “Este rebranding representa mucho más que un cambio visual. Es la evolución natural de una marca con historia, que sigue creciendo y adaptándose sin perder su esencia”, explicó Mónica Arbaje, directora de la firma, durante la presentación.
Para dar forma a esta transformación, la compañía confió en la experiencia de la consultora Inquest, liderada por Luis Rodriguez Troncoso y Nabil Madera Arbaje.
El proceso no fue solo estético; incluyó un estudio integral de marca que buscaba capturar la filosofía central del negocio: crear espacios con historia, armonía y propósito. El resultado es una identidad visual moderna y sobria que logra hablar en presente sin borrar el pasado.
El escenario no pudo ser más simbólico. Deco Expo, el evento más importante del sector en el país, sirvió como marco para este renacimiento. La propia exposición se inspiró en el concepto "Design meets branding", un guiño directo a la transformación de Arbaje Soni.
Dentro de este espacio, talentos nacionales y escuelas de diseño interpretaron la esencia renovada de la marca, demostrando su capacidad para seguir inspirando a las nuevas generaciones.
Con este movimiento, Arbaje Soni no solo actualiza su imagen. Está redefiniendo su lugar en el mercado. La apuesta es clara: ser una marca más cercana y contemporánea, que dialogue con las tendencias globales sin perder la calidez y el arraigo que le han dado sus 60 años de presencia en los hogares dominicanos. Más que una nueva identidad, es la promesa de que lo clásico puede respirar con un aire nuevo.
