El zurdo lanzó ocho entradas de dominio total y Freeman pegó el batazo clave
Los Ángeles .- En un partido cargado de tensión hasta el último out, los Dodgers de Los Ángeles arrancaron con buen pie la Serie de Campeonato de la Liga Nacional tras vencer 2-1 a los Cerveceros de Milwaukee, este lunes por la noche en el American Family Field.
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El protagonista absoluto fue Blake Snell. El zurdo, recién llegado esta temporada al conjunto angelino, ofreció una clase magistral de pitcheo: ocho entradas completas, solo un hit permitido, diez ponches y ni una sola base por bolas. Un dominio tan aplastante que el propio mánager de los Cerveceros, Pat Murphy, no dudó en calificar su actuación como “la más dominante que he visto en diez años”.
Snell impuso respeto desde el primer inning
Desde su primer lanzamiento, Snell mostró control, precisión y confianza. Los bates de Milwaukee no encontraron forma de descifrarlo. Solo un imparable —un sencillo corto al jardín derecho en la tercera entrada— rompió la perfección. Pero fuera de eso, fue un recital de ponches y rodados inofensivos.
Snell, de 32 años, firmó con los Dodgers un contrato de cinco años y 182 millones de dólares. Y hasta ahora, ha cumplido cada centavo: apenas dos carreras permitidas en 21 entradas durante esta postemporada. “Siempre quise estar aquí, ser parte de este equipo. Esto es un sueño hecho realidad”, dijo el lanzador tras la victoria, visiblemente emocionado.
Freeman abrió el marcador con un batazo clave
El duelo de lanzadores se mantuvo sin anotaciones hasta la sexta entrada. Fue entonces cuando Freddie Freeman, con su característico swing compacto, conectó un jonrón solitario por el jardín derecho que rompió el hielo y puso a los Dodgers arriba 1-0.
“Snell fue una obra maestra esta noche”, comentó Freeman después del juego. “Solo traté de aportar lo mío, y ese batazo fue suficiente para darnos el impulso que necesitábamos”.
La segunda carrera de Los Ángeles llegó ya en el noveno, con el marcador 1-0 y las bases llenas. Mookie Betts, paciente en el plato, negoció un boleto que trajo la segunda rayita de los visitantes.
Un cierre de infarto
Pero los Cerveceros no se rindieron tan fácil. En el cierre del noveno, el bullpen de los Dodgers estuvo al borde del colapso. El joven dominicano Jackson Chourio produjo la única carrera de Milwaukee con un elevado de sacrificio ante Roki Sasaki, acercando a su equipo 2-1 y dejando la potencial remontada viva.
Con las bases llenas y dos outs, Dave Roberts llamó al veterano Blake Treinen, quien entró con el juego en la cuerda floja. Treinen no se inmutó: tres lanzamientos más tarde, ponchó a Brice Turang y aseguró la primera victoria de la serie para Los Ángeles.
Una doble jugada que robó miradas
El partido también tuvo su momento curioso. En la cuarta entrada, el jardinero central de Milwaukee, Sal Frelick, casi le robó un jonrón a Will Smith, atrapando la pelota justo en la barda. La jugada derivó en una doble eliminación inusual que frenó en seco la ofensiva de los Dodgers y mantuvo el empate momentáneo.
Un inicio prometedor para Los Ángeles
Con esta victoria, los Dodgers toman la delantera 1-0 en la Serie de Campeonato y, más importante aún, mandan un mensaje claro: su pitcheo está listo para definir partidos grandes.
Snell dejó el listón altísimo, y ahora el reto será mantener ese nivel en el segundo juego de la serie, donde se espera otro duelo cerrado.
Por ahora, Los Ángeles se va de Milwaukee con lo que fue a buscar: una victoria sufrida, pero contundente. Una de esas que marcan el tono de una serie larga.
