El dirigente agradece la confianza de Leonel Fernández y promete una "gran victoria" en 2028
SANTO DOMINGO. — El dirigente político Rafael Paz fue confirmado este viernes como el nuevo presidente de la Fuerza del Pueblo (FP) en el Distrito Nacional, un anuncio que él mismo hizo público a través de sus redes sociales.
La designación, que lo coloca al frente de la estructura partidaria en el centro neurálgico del país, supone un espaldarazo directo a su liderazgo por parte de la cúpula del partido. Paz no tardó en expresar su agradecimiento, mencionando al presidente y líder indiscutible de la organización, Leonel Fernández.
El compromiso: estructura y victoria
"Expreso mi gratitud a mi partido, la Fuerza del Pueblo; a nuestro Presidente y líder Leonel Fernández; a nuestro vicepresidente Radhamés Jiménez y a nuestro secretario general Antonio Florián; así como a la Dirección Política y a la Comisión de Consensos, por nuestra ratificación como presidente de la Fuerza del Pueblo en el Distrito Nacional", manifestó Paz en su comunicado.
La confirmación de Paz, quien también forma parte de la Dirección Política del partido, lo sitúa en una posición estratégica crucial. El Distrito Nacional es el principal centro político y económico del país, un campo de batalla electoral donde la capacidad de movilización y organización es clave para cualquier aspiración presidencial.
En ese sentido, el dirigente fijó su objetivo principal: no solo fortalecer la estructura interna, sino mirar directamente a las próximas elecciones presidenciales.
El motor de la capital
Paz se comprometió a dedicar su "energía, esfuerzo y dedicación al servicio del pueblo dominicano" con un propósito firme: conquistar una gran victoria electoral en 2028 y consolidar la presencia del partido en la capital.
Su ratificación se interpreta en los círculos políticos como una apuesta de la Fuerza del Pueblo por inyectar un liderazgo joven, dinámico y con visión de futuro en una plaza que resulta indispensable para los planes del partido verde.
El reto para Paz es enorme. Debe tomar las riendas de la capital, asegurar el crecimiento, la unidad y la consolidación de la base política en la metrópolis.
Su éxito en la gestión de la estructura del Distrito Nacional será crucial para la estrategia global de la Fuerza del Pueblo de cara a los desafíos electorales que se avecinan.
