El plan incluye la liberación de 20 rehenes vivos y 250 presos palestinos condenados
MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) – El gabinete del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu dio luz verde este jueves al acuerdo impulsado por el expresidente estadounidense Donald Trump para lograr la liberación de rehenes retenidos en Gaza desde los ataques del 7 de octubre de 2023, así como un alto el fuego en el enclave palestino.
“La liberación de todos los rehenes, tanto vivos como muertos, ha sido aprobada”, informó brevemente la oficina de Netanyahu a través de la red social X (antes Twitter).
El voto en el gabinete se retrasó más de tres horas debido a fuertes tensiones internas, principalmente por la oposición del ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, líder del partido ultraderechista Otzma Yehudit. Ben Gvir rechazó el acuerdo por incluir la excarcelación de presos palestinos, a los que tildó de “terroristas”, y anunció públicamente que votaría en contra, al igual que los demás ministros de su formación.
“Liberar a miles de terroristas es un precio insoportable. No puedo formar parte de un gobierno que permita que Hamás continúe gobernando en Gaza. Esa es mi línea roja”, expresó Ben Gvir, asegurando que Netanyahu le había prometido que Hamás no permanecería en el poder.
El acuerdo, según explicó la portavoz del Gobierno israelí, Shosh Bedrosian, contempla un alto el fuego que entraría en vigor 24 horas después de la aprobación del gabinete. A partir de ese momento, se abrirá una ventana de 72 horas para ejecutar la liberación de los rehenes.
El plan contempla la entrega de 20 rehenes vivos y 28 cuerpos de israelíes secuestrados. A cambio, Israel pondrá en libertad a 250 presos palestinos condenados a cadena perpetua y más de 1.700 detenidos gazatíes, muchos de ellos arrestados tras el 7 de octubre y entre los que se encuentran menores de edad.
La iniciativa forma parte de una mediación encabezada por Trump con respaldo regional, que busca aliviar la tensión tras meses de escalada, devastación y presión internacional por la situación humanitaria en Gaza. Aunque la medida ha generado división dentro del gobierno israelí, marca un punto de inflexión en las negociaciones estancadas desde finales de 2023.
Netanyahu, por su parte, aún no ha ofrecido declaraciones directas tras la aprobación, pero fuentes cercanas al Ejecutivo señalan que el acuerdo busca atender la creciente presión interna por el retorno de los rehenes y el desgaste político acumulado por la prolongación del conflicto.