El megaoperativo nacional incauta casi 700 armas blancas y golpea 225 puntos de droga
La Operación “Garantía de Paz 2.0” ha pisado el acelerador y, en apenas 48 horas, las cifras son contundentes: las acciones coordinadas de las fuerzas del orden han sacado de circulación a 84 individuos buscados por la justicia o sorprendidos in fraganti.
El masivo operativo se desplegó de forma simultánea en todo el territorio nacional, involucrando a la Policía Nacional y una serie de agencias clave como el Ministerio de Defensa, la Procuraduría y la DNCD. El objetivo es claro: fortalecer la seguridad ciudadana y restaurar el orden público.
De los 84 arrestados, la mayoría (70) fueron atrapados en el flagrante delito, mientras que seis eran prófugos con cuentas pendientes, y dos delincuentes reconocidos fueron capturados gracias a órdenes judiciales. Este despliegue no es solo una exhibición de fuerza, sino una estrategia para desmantelar estructuras criminales desde sus raíces.
Un arsenal incautado y golpe al microtráfico
Uno de los enfoques principales de esta operación es reducir la violencia callejera, y las cifras de incautación de armas lo confirman. En solo dos días, las autoridades ocuparon nueve armas de fuego, de las cuales cuatro eran completamente ilegales y dos eran de fabricación casera, representando un peligro latente en los sectores intervenidos.
Pero el número más impactante es el de las armas blancas: se confiscaron 692, un arsenal que, de otra forma, habría estado disponible para cometer asaltos y hechos violentos.
En el frente de la lucha contra el microtráfico, las intervenciones fueron igualmente efectivas. Se asaltaron 225 puntos de venta de drogas, logrando la ocupación de 489 porciones de marihuana, 176 de crack y 489 de cocaína.
Además, se desmantelaron 19 pequeñas plantaciones de marihuana y se confiscaron 13 balanzas y cuatro hookahs usadas para el consumo y pesaje de sustancias controladas.
Depuración masiva y control del desorden