Louis Junior Rodríguez, prófugo por cibercrimen, capturado y con extradición en curso a EE. UU.
La red de cibercrimen desmantelada con la Operación Discovery 2.0 sigue arrojando detenciones clave. La Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia dictó prisión preventiva contra Louis Junior Rodríguez Serrano (también conocido como Junior o Lowi Junior Rodríguez Marte), un hombre de 28 años solicitado en extradición por Estados Unidos por su vinculación a esta millonaria estafa transnacional.
Rodríguez Serrano se encontraba prófugo desde agosto de 2023, cuando se puso en marcha la primera fase de la operación que desarticuló la estructura criminal. Tras una activa persecución, el sospechoso fue finalmente localizado y arrestado el pasado 27 de septiembre.
El tribunal, al acoger la solicitud del Ministerio Público, dispuso que Rodríguez Serrano cumpla la prisión preventiva en el Centro de Corrección y Rehabilitación (CCR Rafey Hombres) en Santiago. La audiencia para conocer el pedimento formal de extradición por parte de las autoridades estadounidenses está fijada para el próximo 28 de octubre.
Los cargos en Estados Unidos
En Estados Unidos, el imputado será procesado por graves delitos, incluyendo asociación delictuosa para cometer fraude por medios electrónicos y por correo postal, además de lavado de activos provenientes de esa actividad delictiva.
El proceso ante la Suprema Corte fue representado por la Dirección de Cooperación Jurídica Internacional y Derechos Humanos del Ministerio Público, encabezada por el procurador adjunto Osvaldo Antonio Bonilla Hiraldo. La solicitud de prisión preventiva fue admitida por los jueces Francisco Antonio Jerez Mena, María Garabito Ramírez y Nancy Salcedo.
La compleja red de la operación Discovery
El caso se remonta a una investigación que desenmascaró una red de cibercrimen que se dedicaba a defraudar a cientos de ciudadanos estadounidenses, principalmente adultos mayores desprevenidos, a través de estafas, extorsión y robo de identidad. El fraude se cuantifica en millones de dólares.
La investigación, que duró 13 meses con la cooperación del organismo de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) de Nueva York, reveló que los procesados eran propietarios y operadores de cuatro centros de llamadas o call centers clandestinos.
La organización criminal llamaba a sus víctimas y las convencía de que un familiar estaba en grandes apuros jurídicos y necesitaba dinero de inmediato para pagar fianzas o costos de tribunal, sembrando la desesperación para lograr la transferencia de fondos.
Como resultado de la Operación Discovery 2.0, la Fiscalía de Santiago presentó formal acusación contra 21 imputados y dos entidades societarias, señalados por estafa, intimidación, usurpación de identidad y lavado de activos.
Varios de estos implicados, como Juan Rafael Parra Arias y José Ismael Diloné Rodríguez, han sido ya extraditados a Estados Unidos, al igual que otros procesados en la más reciente Operación Discovery 3.0, confirmando la lucha sostenida del Ministerio Público dominicano contra el cibercrimen.