La Policía logró su rendición tras dos horas de tensión y negociación
Santo Domingo.– Tras más de dos horas de tensión, vigilancia y negociación, la noche de este domingo se entregaron a la Policía Nacional dos hombres acusados de homicidios y asaltos a mano armada. El hecho ocurrió en el sector Guachupita, en el Distrito Nacional, donde ambos permanecían atrincherados en la casa de un familiar, negándose inicialmente a salir.
Los detenidos fueron identificados como Johan Adón, de 19 años, y Andrés Jesús Espinal Pérez, alias Mazazo, de 21. De acuerdo con el vocero de la Policía, Diego Pesqueira, ambos estaban siendo activamente buscados por su presunta participación en múltiples crímenes violentos.
Durante el proceso de entrega, uno de los jóvenes entregó un arma de fuego, la cual fue inmediatamente incautada para fines de investigación. Pesqueira aseguró que se les garantizó la integridad física a ambos, y que todo el procedimiento se llevó a cabo sin uso de la fuerza letal.
El momento en que salieron de la vivienda fue captado por decenas de vecinos que se habían congregado en el lugar. Entre aplausos, gritos y celulares alzados, los presentes celebraron que los jóvenes estuvieran con vida. “¡Están vivos, no les pasó nada!”, se escuchaba entre la multitud, en una escena cargada de tensión, pero sin violencia.
El operativo contó con una notable presencia policial, y aunque se temía un desenlace más drástico, la situación se resolvió sin mayores incidentes. Las autoridades no ofrecieron detalles sobre cuántos homicidios se les atribuyen a los detenidos, pero confirmaron que existían órdenes de arresto previas en su contra.
Por el momento, ambos se encuentran bajo custodia y serán puestos a disposición del Ministerio Público para los procedimientos correspondientes.
El caso ha generado atención tanto por el historial criminal que se les imputa como por la reacción del vecindario, que lejos de mostrarse hostil, pidió por su seguridad. Una escena que deja preguntas abiertas sobre la relación entre los jóvenes, su comunidad y el sistema de justicia.
También se entregaron “Enyer” y “El Gatillero” señalados por múltiples atracos violentos
Mas temprano la Policía Nacional informó que dos jóvenes señalados como delincuentes peligrosos, incluidos en su lista de los más buscados, se entregaron de manera voluntaria tras varios días bajo intensa persecución.


Se trata de Luis Manuel Celedonio, alias Enyer o La Bala, de 18 años, y José Almmando Piña Infante, conocido como El Calvo o El Gatillero, de 19. Ambos estaban siendo activamente buscados por múltiples hechos delictivos, entre ellos varios atracos y agresiones armadas cometidas en una sola noche, donde resultaron heridas de bala al menos cuatro personas.
De acuerdo con la Dirección Central de Investigación Criminal (DICRIM), los dos prevenidos se entregaron ante la presión generada por la difusión pública de sus rostros a través de la campaña “Se Busca”, sumado a los constantes operativos desplegados por la Policía en distintos puntos del país.
Las órdenes de arresto, identificadas como No. 973-2025-EMES-10922, los vinculan a la violación de los artículos 66 y 67 de la Ley 631-16 sobre armas de fuego, en perjuicio de una ciudadana, además de otros actos criminales asociados a sus historiales delictivos.
Los reportes oficiales indican que los jóvenes se desplazaban en motocicletas para cometer robos y atracos con alto grado de violencia, aumentando su perfil de peligrosidad. Las autoridades señalan que sus acciones dejaron varias víctimas lesionadas en distintos puntos del Gran Santo Domingo.
La Policía destacó que la entrega se logró gracias a un “cerco informativo y operativo” sostenido, además de la colaboración ciudadana que ayudó a identificar y localizar a los implicados.
En un comunicado, la institución reiteró su compromiso de no dar tregua al crimen organizado ni a los actos violentos, advirtiendo que continuará con los operativos preventivos y de persecución para ubicar y procesar a quienes intenten evadir la justicia.
“Todo el que atente contra la seguridad ciudadana será buscado, capturado y sometido conforme a la ley. No hay espacio para la impunidad”, advirtió la Policía Nacional.