El dominicano se consagra como el primer jugador de Cleveland con tres temporadas 30-30
Con un solo swing, José Ramírez no solo conectó un jonrón, sino que escribió otro capítulo en su ya impresionante carrera, consolidándose como uno de los peloteros más extraordinarios de su generación. El sábado, el dominicano se convirtió en el primer jugador en la historia de los Guardianes de Cleveland en lograr tres temporadas de 30 jonrones y 30 bases robadas, una marca que lo pone en un club exclusivo de leyendas del béisbol.
El hito llegó en la primera entrada, cuando Ramírez envió la pelota por encima de la cerca contra Joe Ryan, el lanzador de los Mellizos de Minnesota. Ese cuadrangular fue su número 30 de la temporada, un logro que le da una nueva dimensión a su trayectoria.
Su éxito, sin embargo, no fue aislado. Sus compañeros de equipo siguieron su ejemplo, conectando un total de cinco jonrones en el partido para una victoria contundente de 6-0.
Así, los Guardianes han ganado nueve partidos consecutivos, reduciendo la ventaja de los Tigres de Detroit en la Liga Americana a solo 1.5 juegos y acercándose cada vez más a un puesto de comodín.
Ramírez, entre los más grandes del deporte
El logro de Ramírez no es solo un récord de franquicia. Es una hazaña que lo coloca en un selecto grupo de estrellas. Es el segundo bateador ambidiestro y el segundo tercera base en toda la historia de las Grandes Ligas en alcanzar las tres temporadas 30-30, uniendo su nombre al de Howard Johnson.
Aún más impresionante, solo un puñado de jugadores, como Alfonso Soriano, Bobby Bonds y Barry Bonds, tienen más de dos temporadas de este tipo.
La hazaña de Ramírez se suma a otro logro reciente: el viernes, robó su base número 40 de la temporada. Con esto, se une a Kenny Lofton, Omar Vizquel y Brett Butler en un club de élite. Pero la verdadera joya de su carrera es el hecho de que ha logrado dos temporadas consecutivas con 30 jonrones y 40 bases robadas, un hito que solo él, Bobby Bonds, Barry Bonds y Alfonso Soriano han alcanzado.
Un equipo en racha y un futuro prometedor
Mientras Ramírez hacía historia, su compañero Slade Cecconi tuvo una actuación magistral en el montículo. El joven lanzador lanzó siete entradas sin permitir carreras, manteniendo a raya a los bateadores de los Mellizos y demostrando por qué los Guardianes están en una racha tan impresionante.
La combinación de la experiencia y el talento probado de Ramírez con la energía de los jóvenes como Cecconi y Bo Naylor, quien también tuvo una gran jornada, es la clave de su éxito.
La narrativa de esta temporada para Cleveland ha sido la de una marcha silenciosa pero imparable hacia la cima, impulsada por un talento extraordinario y el liderazgo de un pelotero que, sin lugar a dudas, está construyendo un camino directo al Salón de la Fama.