El supuesto grupo se convierte en la excusa de Washington para justificar sus ataques.
La guerra contra las drogas se ha convertido en el último frente de batalla entre Venezuela y Estados Unidos. Washington acusa al presidente Nicolás Maduro de liderar una supuesta red criminal vinculada al narcotráfico, el "Cártel de los Soles". Este grupo, que Caracas califica de "invento", se ha convertido en la justificación de la administración Trump para imponer sanciones y perpetrar ataques en el Caribe.
La tensión escaló en julio, cuando el Departamento de Estado de Estados Unidos designó al supuesto cártel como una organización terrorista y lo agregó a su lista de sanciones. Según Washington, esta red criminal apoya a otros grupos como el Tren de Aragua y el mexicano Cártel de Sinaloa, representando una "amenaza grave" para la seguridad de EE. UU.
El presidente Trump no ha dudado en ser contundente. Ha confirmado el derribo de al menos tres embarcaciones en el Caribe, a las que califica de "narcolanchas". Trump asegura que los narcotraficantes "serán cazados" en su intento de introducir estupefacientes en suelo estadounidense, una postura que ha sido respaldada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent.
Más que un cártel de drogas
Expertos y analistas, sin embargo, desestiman la idea de una organización criminal jerárquica liderada por Maduro. El 'think tank' Insight Crime asegura que el "Cártel de los Soles" es, en realidad, una red de corrupción donde altos cargos militares y políticos "se benefician de los acuerdos con narcotraficantes", sin formar parte de una estructura mafiosa. Es decir, estos funcionarios harían la "vista gorda" al tráfico de drogas a cambio de dinero.
Para estos expertos, la designación de EE. UU. como cártel de drogas refuerza una "visión equivocada", cuando en realidad se trata de un sistema de corrupción estatal con fines puramente económicos.
Las sanciones impuestas por las autoridades estadounidenses recaen sobre individuos que, en su mayoría, ya contaban con restricciones, pero el pretexto de una red criminal ha permitido a la administración Trump justificar sus operaciones militares en la región.
Una postura de legítima defensa
Desde Caracas, la respuesta ha sido de indignación. El gobierno venezolano ha reafirmado que el "Cártel de los Soles" es un "invento" de Estados Unidos, que ha sido utilizado por años para justificar agresiones. El ministro del Interior, Diosdado Cabello, ha declarado que "cada vez que alguien molesta, es colocado como jefe del Cártel de los Soles".
La situación ha llevado a varios países de la región, como Colombia, Paraguay y Argentina, a declarar al supuesto cártel como una organización terrorista, a pesar de la postura de Venezuela.
El Parlamento Europeo también ha solicitado una resolución similar. Por su parte, Maduro ha amenazado con la "lucha armada" si el país es "agredido", reiterando su "legítimo derecho a la defensa".
Mientras tanto, organizaciones como Amnistía Internacional han advertido sobre el "precedente peligroso" de los ataques de EE. UU. en el Caribe. La ONG ha calificado la acción como una "clara violación del derecho a la vida" y ha señalado la "dudosa legalidad" de estas operaciones.
La situación, según los expertos, podría ser un intento de Washington de presionar a Caracas a medida que amplía su presencia militar en la región. Con datos de Europa Press