La empresa sustraía energía por más de RD$2.2 millones al año en La Altagracia
La Altagracia. – Una fábrica de productos lácteos operaba con una conexión eléctrica alterada que le permitía consumir grandes volúmenes de energía sin pagar lo correspondiente. La jugada, que se venía sosteniendo durante un tiempo aún por determinar, fue descubierta esta semana por técnicos de Edeeste, en conjunto con la Procuraduría General Adjunta para el Sistema Eléctrico (PGASE).
La intervención se llevó a cabo en la carretera Villa Hortensia–El Seibo, en la comunidad de Hato de Mana, y reveló una manipulación directa del sistema de medición eléctrica. Según el informe técnico, la empresa dejaba de facturar al sistema 231,670 kilovatios hora al año, lo que representa un perjuicio económico de más de RD$2.2 millones.
El operativo también contó con la participación de inspectores de la Superintendencia de Electricidad (SIE), quienes confirmaron que la alteración era intencional. No se trataba de una falla técnica o un error humano. Era fraude, claro y directo.
Este tipo de delito no solo representa una pérdida para la empresa distribuidora —en este caso, Edeeste—, sino que golpea de forma indirecta al resto de los usuarios del sistema. “Cuando alguien roba energía, los efectos se sienten en todo el sistema: hay más inestabilidad, más apagones y más presión sobre quienes sí pagan su consumo”, indicó una fuente vinculada a la investigación.
Desde Edeeste y PGASE se explicó que esta intervención forma parte de una ofensiva más amplia para reducir el fraude eléctrico, especialmente en grandes centros de consumo industrial y comercial, donde este tipo de prácticas suele estar más estructurado y oculto.
“Este no es un caso aislado. Tenemos un plan sistemático de inspecciones que busca limpiar el sistema de estos abusos que afectan tanto al Estado como a los ciudadanos honestos”, señaló la institución en un comunicado.
Las autoridades no ofrecieron detalles sobre el nombre comercial de la empresa intervenida, pero confirmaron que el caso está bajo investigación legal y podría derivar en sanciones penales y económicas.
Al mismo tiempo, reiteraron el llamado a los consumidores, especialmente del sector privado, a revisar su situación contractual y reportar cualquier irregularidad mediante los canales oficiales. La meta, aseguran, es lograr un sistema eléctrico más equitativo, donde todos paguen lo que consumen.
Desde Edeeste, la Dirección de Comunicación insistió en que no se trata solo de recuperar dinero perdido, sino de garantizar un servicio eléctrico estable, justo y sostenible a largo plazo.
“El sistema no puede seguir cargando con los que hacen trampa. Hay consecuencias y las estamos aplicando”, concluyó el comunicado.