La medida, notificada de manera formal a los prestadores, busca optimizar el uso de recursos públicos
El Seguro Nacional de Salud (SeNaSa) anunció un cambio en su estrategia de contratación dentro del régimen subsidiado: diez centros privados de atención primaria dejarán de operar bajo el esquema de pago capitado y podrán migrar a la modalidad de pago por servicios prestados.
La medida, notificada de manera formal a los prestadores, busca optimizar el uso de recursos públicos, garantizar atenciones más oportunas a los afiliados y fortalecer la red pública de servicios. SeNaSa explicó que la decisión responde a una política de mayor equidad y transparencia en la asignación de fondos.
Los centros incluidos en este proceso tendrán un plazo de 30 días para seguir ofreciendo servicios mientras se realiza la transición. Durante ese tiempo podrán acercarse a la institución y evaluar las condiciones del nuevo modelo.
Un giro en la forma de pagar la atención primaria
En la actualidad conviven dos modalidades dentro del sistema: el pago capitado, que entrega una suma fija mensual por cada afiliado independientemente de las atenciones recibidas, y el pago por servicio, que remunera de manera directa cada consulta, procedimiento o intervención efectuada.
La transición al esquema de pago por servicios en el régimen subsidiado se presenta como una herramienta para reforzar la transparencia en el manejo de fondos públicos y responder de forma más inmediata a las necesidades reales de la población afiliada.
El director ejecutivo de SeNaSa, doctor Edward Guzmán, sostuvo que este paso es parte de un plan integral para hacer más sostenible el sistema:
“Estamos concentrando los recursos estatales en un modelo que nos permite fortalecer la red pública, asegurar la calidad de las atenciones y dar mayor sostenibilidad al régimen subsidiado”, señaló.
Impacto y alcance de la decisión
La disposición no afecta los servicios del régimen contributivo, cuyos contratos con prestadores privados permanecen vigentes y funcionando con normalidad. Tampoco interrumpe la atención en los centros privados que ya operan bajo el pago por servicios, quienes seguirán trabajando con SeNaSa de manera regular.
Más que una ruptura, la medida representa una reorientación del gasto en salud primaria. Según explicó la entidad, los fondos se dirigirán con mayor precisión hacia las atenciones efectivamente brindadas, evitando que se diluyan en asignaciones fijas sin relación con la demanda real.
Con esta acción, SeNaSa reafirma su papel como garante del acceso a la salud para millones de dominicanos afiliados al régimen subsidiado. Al mismo tiempo, fortalece la red pública de atención primaria, que se perfila como el eje central de un sistema de salud más equitativo, transparente y sostenible.
