El bombardeo deja dos muertos, incluido un niño, informa el gobierno
Un ataque ruso en Kiev ha sacudido la capital ucraniana, dejando un saldo de al menos dos muertos, entre ellos un niño menor de un año, y 17 heridos, informó el gobierno.
El bombardeo, que causó un incendio en un edificio gubernamental en el centro de la ciudad, marca lo que la primera ministra de Ucrania ha calificado como la primera vez que Moscú ataca de manera directa la sede del gobierno.
El alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, informó de la tragedia en el distrito de Svyatoshyn, mientras que el jefe de la Administración Militar de la localidad, Timur Tkachenko, confirmó el incendio en la sede del gobierno en el distrito de Pechersk.
Las imágenes compartidas por la primera ministra, Yulia Sviridenko, muestran llamas y humo saliendo de los pisos superiores del edificio, un daño que ella describió como un ataque "masivo" del Kremlin.
Sviridenko hizo un llamado al mundo para que la respuesta no se limite a palabras. "Necesitamos reforzar la presión de las sanciones, principalmente contra el petróleo y el gas rusos. Necesitamos nuevas restricciones que afecten a la maquinaria militar del Kremlin", aseveró la política ucraniana.
Además del edificio gubernamental, varios bloques de pisos y vehículos fueron bombardeados, provocando incendios y el desprendimiento de escombros. Entre los heridos se encuentra una mujer embarazada, y siete de los 17 afectados tuvieron que ser hospitalizados.
La tragedia ocurrió después de que el propio Klitschko advirtiera a la población sobre la amenaza de bombardeos y les pidiera buscar refugio. Los servicios de bomberos y rescate se han movilizado para atender a los afectados y controlar los incendios.
Moscú niega ataques a objetivos civiles
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa ruso ha negado haber atacado objetivos civiles, asegurando que su ofensiva "masiva" se centró en instalaciones militares. A través de un comunicado en Telegram, Moscú afirmó que sus misiles y vehículos aéreos no tripulados fueron dirigidos contra "fábricas de drones y bases aéreas militares" en el centro, sur y este de Ucrania.
Moscú insiste en que su ataque se limitó a "objetivos designados" y que "no se realizaron ataques contra otros objetivos dentro de las fronteras de Kiev". Señalaron en específico a una planta industrial y una base logística al sur y oeste de la capital.
La ofensiva rusa en Kiev llega apenas un día después de que al menos 15 personas resultaran heridas por ataques de drones rusos en Zaporiyia, lo que subraya la intensidad del conflicto en todo el territorio ucraniano.
Por su parte, el jefe de la región rusa de Voronezh, Alexander Gusev, confirmó ataques ucranianos en su zona, que resultaron en un hombre herido y seis drones interceptados, evidenciando que la guerra continúa en ambos lados de la frontera. Con datos de Europa Press