El Ministerio de Trabajo paraliza obras que ponían en riesgo a los obreros
El Ministerio de Trabajo ha tomado medidas drásticas y ha ordenado la paralización de 15 obras de construcción en el Distrito Nacional. El motivo es que las construcciones no cumplen con los estándares de seguridad y salud, lo que pone en peligro la vida de los trabajadores.
La decisión llega como resultado de una serie de inspecciones que revelaron una preocupante falta de medidas de protección en los centros de trabajo.
Durante las inspecciones en 41 empresas constructoras, se levantaron un total de 380 actas. De estas, 304 fueron advertencias por incumplimientos menores, mientras que 76 correspondieron a infracciones graves.
Entre las faltas detectadas se encuentran la ausencia de comités de seguridad, la falta de señalización, la no provisión de equipos de protección personal, y la carencia de botiquines y extintores.
Las violaciones no se limitan a la seguridad en el lugar de trabajo. El Ministerio de Trabajo también encontró incumplimientos al Código de Trabajo, como la falta de planillas de personal fijo y móvil, la violación a la nacionalización del trabajo, y la falta de pago de salarios mínimos, vacaciones y horas extras.
El ministro de Trabajo, Eddy Olivares, fue claro en su comunicado: "Los trabajadores de la construcción y el entorno donde son edificadas las torres tienen que contar con seguridad, y la forma de hacerlo es utilizando los equipos necesarios para prevenir cualquier tipo de accidente".
La urgencia de estas medidas quedó en evidencia durante la inspección en una de las torres, donde un trabajador sufrió una caída, afortunadamente sin lesiones de gravedad. El incidente se produjo precisamente por la ausencia de las herramientas de seguridad que debieron haberlo protegido.
Estos operativos, según el Ministerio, responden a un compromiso de garantizar la seguridad y la salud de los trabajadores del sector. El objetivo, más allá de la sanción, es concientizar a los constructores para que cumplan estrictamente con las normas que rigen tanto la seguridad como los derechos laborales.
Con estas acciones, la cartera de Trabajo envía el mensaje de que la seguridad de los obreros no es negociable y el respeto a sus derechos es una obligación que se hará cumplir.