Pide a la justicia que actúe para que el crimen no quede impune
Más de una década después del asesinato del regidor de Bayaguana, Renato Castillo Hernández, su viuda, Raysa Acosta, vuelve a la carga en una lucha legal que parece interminable. El próximo lunes, 8 de septiembre, en el Tribunal Colegiado de Monte Plata, se espera una audiencia clave en un caso que se ha alargado por 11 años.
En un comunicdo enviado a DiariodigitalRD, Acosta clama por una condena para el exalcalde Nelson Sosa Marte, apodado "Opi", a quien acusa de ser el autor intelectual del crimen.
Castillo fue asesinado el 25 de junio de 2014, justo después de denunciar supuestos actos de corrupción en la alcaldía. Los "obreros" del crimen, como los llama Raysa Acosta, ya cumplen condenas, pero el presunto cerebro del plan, Sosa Marte, sigue en libertad.
"Mientras los que ejecutaron el crimen están presos, el exalcalde Sosa Marte, alias 'Opi', se burla de nuestra familia y de la justicia", declaró Acosta, quien asegura que el exfuncionario se siente protegido por sus conexiones políticas
"Sosa Marte quiere tener dos asesinatos, el de mi esposo y el del expediente", denunció con indignación.
Un camino de obstáculos y una apelación que da esperanza
La viuda ha vivido un calvario legal, con decenas de intentos por parte de la defensa de Sosa Marte para evadir la justicia. Sin embargo, un fallo reciente de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) ha reavivado la esperanza. La SCJ anuló una sentencia anterior de la Corte de Apelación que había descargado a "Opi".
El argumento de la Suprema destaca que es una contradicción que se haya confirmado la condena de 20 años a dos de los implicados por planificar el crimen por orden de Sosa Marte, mientras que a él lo descargaron por falta de pruebas.
Para Raysa Acosta, la situación es indignante. "Yo estaba embarazada de un mes y 15 días cuando lo mataron, y mi hijo ya tiene 11 años. Dice que quiere ser abogado para hacer justicia por su papá", relató con la voz quebrada. La viuda, ahora madre de cuatro hijos huérfanos, no pierde la fe en el sistema judicial dominicano.
Un llamado a las altas esferas
Acosta hizo un llamado directo al presidente Luis Abinader, a la procuradora general Miriam Germán Brito y al presidente de la SCJ, Luis Henry Molina, para que este caso no se cierre en la impunidad. "Que esta vez el dinero no gane y no derrote a la justicia", demandó, señalando el poder económico y los vínculos políticos de Sosa Marte como los principales obstáculos para la condena.
La viuda citó la inconsistencia de las sentencias anteriores: mientras Antonio Rafael Olivo Javier y Fredy Alberto de la Cruz fueron condenados a 20 años, y Marcial Cuello Soto y Yolkis Severino Alberto recibieron 30 años, Sosa Marte fue absuelto.
Según Acosta, esta decisión se logró gracias a la intermediación de un juez, un hecho que ya está bajo investigación de la Inspectoría del Poder Judicial.
En un nuevo juicio, Raysa Acosta espera que la justicia no se doblegue ante el poder. Su objetivo es claro: conseguir una sentencia que finalmente ponga fin a una década de impunidad y dé a su familia la paz que tanto ha buscado.