La inversión de 20 millones de dólares y apoyo del BID será un puente ambiental entre Haití y RD
En un paso histórico para la cooperación regional, la empresa dominicana Cilpen Global Business ha iniciado la construcción del primer centro integral de gestión de residuos sólidos en Haití. Este proyecto, bautizado como Himalaya y ubicado en la ciudad de Limonade, se levanta como una solución tangible a la crisis de manejo de desechos que aqueja al país caribeño.
Con una inversión inicial de 20 millones de dólares, financiada por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la iniciativa no solo busca sanear el entorno, sino también inyectar dinamismo económico y esperanza en una de las regiones más vulnerables informa la empresa en un comunicado.
El relleno sanitario Himalaya está diseñado para procesar hasta 500 toneladas de residuos diariamente, un cambio radical en un país donde más del 70% de los desperdicios terminan en vertederos inadecuados.
La expansión de Cilpen, una compañía pionera en la valorización de residuos en su país de origen, no solo exporta tecnología y conocimiento, sino que también establece un precedente sobre cómo la sostenibilidad puede convertirse en un motor de desarrollo en el Caribe.
Más allá de la gestión ambiental, este proyecto tiene un profundo impacto social y económico. Se espera que genere más de 150 empleos formales, ofreciendo capacitación técnica y oportunidades a proveedores locales de bienes y servicios.
La inversión, respaldada por organismos multilaterales, fortalece la institucionalidad haitiana en un sector clave para la salud pública y el bienestar de sus ciudadanos. La transformación afectará directamente a las ciudades de Cabo Haitiano, Limonade y Mouchinette, beneficiando a más de 600,000 personas.
Pedro José Cabrera, copresidente de Cilpen Global Business, lo resumió de manera elocuente: “Con este proyecto damos un paso decisivo a llevar nuestras soluciones al Caribe. La lucha contra el cambio climático y los esfuerzos por un planeta sostenible no tiene fronteras”.
Las palabras de Cabrera no son solo una declaración de intenciones, sino un reflejo del liderazgo que República Dominicana está asumiendo en la economía circular y la gestión de residuos a nivel regional.
La trayectoria de Cilpen en su país es una prueba de su eficacia. Desde 2017, la empresa ha reciclado más de 1.100 millones de botellas de plástico y tratado decenas de miles de toneladas de residuos mensualmente, impactando positivamente la vida de más de 2 millones de dominicanos.