Trump confirma una operación militar contra un buque sospechoso de narcotráfico.
Washington.- En un anuncio cargado de intención política y mensaje militar, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, confirmó este martes que fuerzas estadounidenses atacaron un barco en aguas del Caribe que, según dijo, transportaba drogas desde Venezuela.
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“Hace solo unos minutos, disparamos contra un barco que llevaba drogas”, afirmó desde el Despacho Oval, sin entrar en detalles sobre la localización exacta ni el tipo de armamento usado en la operación. Trump aprovechó también para subrayar que “grandes cantidades” de droga llegan a Estados Unidos desde territorio venezolano, lo que encaja con su línea habitual de críticas al Gobierno de Nicolás Maduro.
La acción fue rápidamente respaldada por el senador y secretario de Estado Marco Rubio, quien aseguró en redes sociales que la embarcación atacada estaba operada por una organización “narcoterrorista” previamente sancionada por Washington.
El episodio se produce en un contexto ya tenso entre ambos países. Un día antes, el presidente venezolano Nicolás Maduro había denunciado ante la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) la presencia de ocho buques de guerra y un submarino nuclear de Estados Unidos patrullando en aguas del Caribe, cerca de Venezuela.
Aunque no está claro si el ataque confirmado por Trump está directamente relacionado con esos movimientos navales, todo indica que se trata de una acción dentro de la operación antinarcóticos que EE.UU. mantiene en la región desde hace años, intensificada durante su administración.
Lo que sí es evidente es que Washington busca enviar un mensaje claro: no tolerará lo que considera tráfico de drogas con respaldo político desde Caracas. Y lo hace con fuego.
Ni el Pentágono ni la Casa Blanca han ofrecido más detalles técnicos sobre el ataque: no se ha especificado el tipo de embarcación interceptada, cuántas personas iban a bordo, ni si hubo detenidos o bajas.
Por su parte, el Gobierno de Venezuela aún no ha emitido una respuesta oficial al ataque, pero se espera una reacción en las próximas horas, dada la gravedad del incidente y la retórica habitual del régimen chavista frente a cualquier acción militar estadounidense en la región.
La tensión sigue escalando en el Caribe. Y el mar, como pocas veces, se ha convertido en el escenario de una nueva batalla política y militar entre dos gobiernos enfrentados.
