Más de 300 empleos directos y 150 mil cruceristas previstos en 2025
Santo Domingo.- El puerto de Cabo Rojo se ha convertido en uno de los motores económicos más importantes para la provincia de Pedernales y el sur del país. Así lo aseguró Jean Luis Rodríguez, director ejecutivo de la Autoridad Portuaria Dominicana (APORDOM), al destacar el impacto directo que ha tenido la terminal en la generación de empleos y el desarrollo turístico de la región.

Rodríguez explicó que, desde que entró en operaciones, Port Cabo Rojo ha generado más de 300 empleos directos y cerca de mil indirectos, lo que ha permitido que muchos jóvenes de la zona puedan tener por primera vez un empleo digno sin tener que migrar. “Antes, muchos tenían que irse porque simplemente no había oportunidades. Hoy están regresando a sus comunidades porque ya hay razones para quedarse”, afirmó.
Durante una entrevista en el programa Libremente, del Grupo de Medios Panorama, Rodríguez explicó que cada crucerista que desembarca en el Caribe gasta en promedio entre 90 y 120 dólares. En el caso de República Dominicana, esa cifra ronda los 108 dólares por visitante, lo que representa una inyección constante de divisas a las economías locales.
El impacto económico no se queda en Pedernales. La estrategia de expansión portuaria ha empezado a tomar forma con la ejecución de tres nuevos puertos turísticos, cada uno con una identidad propia, pensados para diversificar la oferta del país en el mercado de cruceros.
Crecimiento sostenido en llegada de cruceros
En septiembre, República Dominicana espera la llegada de 23 cruceros distribuidos entre tres terminales: Amber Cove, Taíno Bay y Cabo Rojo. La terminal de Amber Cove, en Puerto Plata, lidera el listado con 12 cruceros programados, seguida por Taíno Bay con 9, y Cabo Rojo con 2.
Entre las embarcaciones previstas para arribar al país se encuentran nombres reconocidos como MSC Worlds America, Carnival Mardi Gras, Carnival Magic, Celebrity Reflection, Norwegian Escape y Oasis of the Seas, lo que refuerza el posicionamiento de República Dominicana como uno de los destinos favoritos para las principales líneas de cruceros del mundo.
Rodríguez destacó que parte del éxito en la gestión portuaria ha estado en mejorar los procesos internos. “Hemos incrementado la eficiencia en el cobro y el gasto, lo que nos permite reinvertir en más infraestructura y asegurar que cada puerto funcione de forma óptima”, explicó.
El clima, factor a considerar
APORDOM aclaró que el calendario de llegadas de cruceros está sujeto a cambios, especialmente por causas meteorológicas. En caso de condiciones adversas, las rutas pueden ser modificadas por las navieras, afectando el arribo previsto. Esta es una medida estándar en la industria de cruceros, que prioriza la seguridad de los pasajeros y las tripulaciones.
Más allá del turismo
Aunque el enfoque está puesto en los cruceros y el turismo, Jean Luis Rodríguez subrayó que la visión del Gobierno con el desarrollo portuario es más amplia: se trata de crear polos de desarrollo económico autosostenibles en zonas que históricamente han estado rezagadas.
Pedernales, una de las provincias con mayores índices de pobreza del país, hoy se perfila como un caso de transformación impulsado por la infraestructura portuaria y la llegada del turismo. “La meta es que la gente tenga opciones. Que no tenga que irse a Santo Domingo o Santiago para conseguir trabajo. Que pueda vivir bien donde nació”, concluyó Rodríguez.
Con más inversiones planificadas, cruceros en ruta y una región que empieza a reactivarse, el puerto de Cabo Rojo no solo mueve barcos, también empieza a mover la economía del sur.