Lee Jae Myung asegura que su encuentro superó las expectativas pese al temor inicial
El presidente de Corea del Sur, Lee Jae Myung, admitió este lunes que su equipo llegó a temer un “momento Zelenski” durante la reunión con el expresidente estadounidense Donald Trump en el Despacho Oval.
La preocupación surgió después de que Trump publicara en redes sociales comentarios que sugerían que Corea del Sur no era el lugar ideal para hacer negocios, reseña Europa Press.
Lee explicó que su equipo temía un episodio similar al que sufrió el presidente ucraniano Volodímir Zelenski en febrero, cuando se encontró en medio de un intenso cuestionamiento de Trump y su equipo, que iba desde su supuesta falta de gratitud hasta detalles sobre su vestimenta.
Pese al recelo inicial, el mandatario surcoreano aseguró que confiaba en que su encuentro transcurriría sin incidentes. Incluso bromeó durante un acto en el Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales: “Esto se debe a que había leído el libro del presidente Trump, El arte de la negociación”.
Según Lee, la reunión superó sus expectativas. Los temas abordados incluyeron estrechar los lazos económicos entre ambos países y modernizar la alianza bilateral para que fuese más recíproca y capaz de adaptarse al cambiante panorama de seguridad internacional.
En el marco del encuentro, Corea del Sur anunció una inversión de unos 150.000 millones de dólares (aproximadamente 130.000 millones de euros) en Estados Unidos, centrada principalmente en industria militar, energía y transporte. La medida busca consolidar la cooperación estratégica y abrir nuevas oportunidades de negocios en sectores clave.
Lee destacó la importancia de este tipo de acuerdos, no solo desde el punto de vista económico, sino también como herramienta para fortalecer la cooperación y la confianza mutua entre Washington y Seúl. Además, la inversión reafirma la posición de Corea del Sur como un socio confiable y comprometido con el desarrollo tecnológico y militar de la región.
El mandatario surcoreano aseguró que, pese a los temores iniciales, el encuentro se desarrolló en un clima de respeto y diálogo, dejando claro que las relaciones entre ambos países no solo se sostienen en compromisos económicos, sino también en una visión compartida de seguridad y cooperación internacional.
El episodio refleja cómo las tensiones políticas y la percepción pública pueden generar expectativas dramáticas antes de una reunión internacional, pero también cómo la preparación y la experiencia permiten transformar un encuentro potencialmente tenso en un acuerdo estratégico con beneficios concretos para ambas naciones.
En definitiva, Corea del Sur logró sortear los temores de un “momento Zelenski” y cerrar una serie de compromisos que refuerzan su posición en la escena global y proyectan un futuro de colaboración más sólido y estratégico con Estados Unidos.