El GC-114, de fabricación estadounidense, apoyará labores de interdicción y rescate
La seguridad marítima de la República Dominicana recibe un impulso clave con la incorporación del guardacostas “ARCTURUS” GC-114, una moderna embarcación de patrullaje costero que se suma a la flota de la Armada como parte del esfuerzo conjunto entre el país y los Estados Unidos en la lucha contra amenazas regionales.
El buque fue adquirido bajo el programa de Venta Militar Extranjera (FMS) del Gobierno estadounidense, a través de la Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa (DSCA). La operación se concretó bajo un esquema de compra-donación en el que el Estado dominicano cubrió el 30 % del valor y Estados Unidos financió el restante 70 %, reforzando los vínculos de cooperación bilateral en materia de defensa.
El “ARCTURUS” arribó al Puerto de Sans Soucí, donde fue recibido en una ceremonia encabezada por la encargada de negocios de la Embajada de los Estados Unidos, Patricia Aguilera, y el ministro de Defensa, teniente general Carlos Antonio Fernández Onofre. También estuvieron presentes representantes del alto mando militar, incluido el comandante general de la Armada, vicealmirante Agustín Morillo Rodríguez, y funcionarios estadounidenses como Michael Jensen y Joseph Humire, del Departamento de Defensa.
Un salto en capacidad operativa
El nuevo guardacostas pertenece a la clase Defiant 85 (Near Coastal Patrol Vessel) y fue construido por el astillero Metal Shark Boats, en Luisiana. Con 87 pies de eslora y 19 de manga, el GC-114 está diseñado para misiones de patrullaje, interdicción y rescate en aguas próximas a la costa.
Entre sus características técnicas destacan:
- Casco de aluminio en forma de “V” con mamparos estancos para mayor seguridad estructural.
- Dos motores Caterpillar C32, que alcanzan velocidades de hasta 26 nudos.
- Capacidad de desplazamiento de 20 toneladas, tripulación para 22 personas y autonomía para misiones de mediano alcance.
- Sistema de lanzamiento de bote inflable rígido (RIB) de 18 pies, con dos motores fuera de borda, ideal para operaciones rápidas.
- Preparado para montar entre tres y cinco afustes para ametralladoras medianas y pesadas.
Con esta incorporación, la Armada ya cuenta con dos unidades de este tipo. El primero, el GC-102 “BETELGEUSE”, fue integrado en agosto de 2020. La llegada del “ARCTURUS” no solo refuerza la capacidad de patrullaje, sino que también consolida la estrategia de modernización de la flota naval dominicana, orientada a enfrentar los desafíos de seguridad marítima contemporáneos.
Contra el crimen transnacional y en favor de la soberanía
El GC-114 será una pieza clave en la lucha contra delitos como el narcotráfico, la pesca ilegal, la migración irregular y el crimen organizado transnacional. También aumentará la capacidad de respuesta ante emergencias en el mar, incluyendo operaciones de búsqueda y rescate.
Finalizado el acto de entrega, autoridades dominicanas y estadounidenses sostuvieron una reunión estratégica en la que abordaron temas prioritarios para la seguridad marítima de la región. El encuentro reafirmó el compromiso de ambos países de mantener una colaboración estrecha en defensa, protección de fronteras marítimas y operaciones conjuntas ante amenazas comunes.
Con el “ARCTURUS” navegando ya bajo bandera dominicana, la Armada da un paso firme hacia el fortalecimiento de su presencia en el mar y su capacidad para proteger la soberanía nacional.
