Integrarse a redes globales impulsa crecimiento hotelero, empleo y experiencias auténticas en RD
La República Dominicana atraviesa un momento estelar en su historia turística. Durante el primer semestre de 2025, más de 6 millones de visitantes internacionales llegaron al país, un salto notable frente al año anterior. Y las proyecciones oficiales del Ministerio de Turismo son aún más ambiciosas: para finales de agosto, la cifra podría superar los 8 millones de viajeros.
Este repunte no es casualidad. A la belleza de sus playas y la riqueza histórica del país, se suma una infraestructura hotelera en constante expansión y una oferta turística cada vez más diversificada: desde experiencias de aventura y naturaleza hasta el creciente turismo de bienestar.
Ese dinamismo ha abierto la puerta a un nuevo fenómeno: la integración de hoteles independientes a redes internacionales, en particular al portafolio de Hyatt Inclusive Collection (HIC).
Una apuesta por crecer sin perder identidad
La estrategia de Hyatt va más allá de sumar habitaciones de lujo. Su propuesta busca que los hoteles locales accedan a estándares globales de calidad, al mismo tiempo que refuerzan su identidad y aportan al desarrollo de sus comunidades.
“Hyatt Inclusive Collection abre nuevas puertas para hoteles independientes, ofreciéndoles crecer en una red internacional mientras generan empleo local y promueven experiencias auténticas que resaltan la cultura dominicana”, explica Fernando Fernández, vicepresidente de Desarrollo de HIC.
La integración implica mucho más que un cambio de nombre. Durante el proceso, se incentiva el uso de materiales locales, la contratación de mano de obra de la zona y la creación de experiencias que conecten al viajero con la comunidad: excursiones, actividades culturales y encuentros con la vida cotidiana del destino.
Beneficios compartidos: hoteleros, comunidad y visitantes
Los hoteles que se suman a HIC reciben un respaldo integral: desde la modernización de instalaciones hasta la implementación de tecnología y prácticas sostenibles.
Además, tienen acceso a una red global de distribución y programas de lealtad como World of Hyatt o Unlimited Vacation Club, que aseguran mayor visibilidad y flujo de reservaciones.
El beneficio también es tangible para las comunidades. El modelo fomenta la compra de insumos y servicios locales, genera empleos durante la construcción y la operación de cada resort, y asegura que la identidad cultural y arquitectónica de cada zona sea respetada.
Marcas como Secrets, Dreams y la nueva Hyatt Vivid Hotels & Resorts son las banderas de esta expansión. Cada una adapta su concepto al entorno, incorporando elementos arquitectónicos propios de la región y diseñando experiencias que permitan al huésped sumergirse en las tradiciones dominicanas.
Ejemplos recientes son el Secrets Playa Esmeralda Resort & Spa y el próximo Dreams Playa Esmeralda Resort & Spa en Miches, además de la futura apertura del Hyatt Vivid Punta Cana, un resort solo para adultos que promete ampliar la oferta turística y generar nuevas oportunidades laborales.
En este panorama, los hoteles independientes no solo aseguran su competitividad, sino que se convierten en protagonistas de un turismo más sostenible, inclusivo y conectado con la esencia dominicana.