Informe regional aborda desafíos, avances y brechas educativas en contextos migratorios
La UNESCO presentó este martes un informe pionero sobre la educación de personas en situación de movilidad humana en América Central, México y República Dominicana, en el marco de la XXXVIII Reunión del Consejo de Ministros y Ministras de Educación de la CECC-SICA.
El estudio, titulado “La educación y la movilidad humana en América Central, República Dominicana y México”, reúne datos y evidencias sobre el derecho a la educación de personas migrantes, refugiadas, desplazadas y apátridas, además de sistematizar los esfuerzos realizados por Ministerios de Educación, organizaciones de la sociedad civil y agencias de Naciones Unidas.
El documento fue elaborado por la Oficina Regional de la UNESCO para América Central, México y Colombia, en coordinación con la CECC/SICA, ACNUR, OIM, UNICEF, el Consejo Noruego para Refugiados y RET International, con colaboración especial de la Fundación Ses y la Cátedra UNESCO de The George Washington University.
Avances y desafíos persistentes en la región
El informe reconoce los esfuerzos nacionales y subregionales en normativas, políticas e iniciativas que buscan garantizar la educación a personas en movilidad, pero evidencia brechas significativas en permanencia y logros de aprendizaje, especialmente entre adolescentes y jóvenes. Además, el acceso a una educación multicultural sigue siendo limitado.
Se identifican limitaciones en programas que priorizan la educación no formal de corta duración para empleabilidad, dejando rezagadas las iniciativas que promueven la continuidad y finalización de trayectorias educativas.
También se destaca que muchas políticas usan términos genéricos como “migrantes” o “personas extranjeras”, sin atender la diversidad real de estas poblaciones, dejando poco abordadas a las personas apátridas, desplazadas internamente y en tránsito.
Colaboración y datos para decisiones efectivas
El informe subraya que la colaboración multi actoral e intersectorial es fundamental para garantizar el derecho a la educación de estos grupos. Además, advierte sobre la limitada inclusión estadística, lo que dificulta la comprensión de sus necesidades específicas y la elaboración de políticas basadas en evidencia.
“Este informe es un espejo de nuestra realidad educativa. La movilidad humana demanda sistemas educativos resilientes, políticas y cooperación renovada para que nadie quede fuera del derecho a la educación a lo largo de su vida”, señaló Alexander Leicht, director de la Oficina Regional de la UNESCO.
El estudio servirá como herramienta de referencia para los países de la subregión, orientando la toma de decisiones y promoviendo iniciativas innovadoras que reduzcan las brechas educativas que enfrentan estas poblaciones a menudo invisibilizadas.
La presentación busca generar compromiso y acciones coordinadas entre estados, sociedad civil y cooperación internacional, priorizando a niñas, adolescentes y jóvenes.
El informe concluye que garantizar la educación en contextos de movilidad humana es clave no solo para proteger este derecho, sino también para fortalecer otros derechos relacionados, y para construir sociedades más inclusivas y resilientes en toda la región.