El 45 % de los universitarios estudia carreras con baja demanda laboral
La Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) lanzó una advertencia clara: el sistema educativo dominicano no está respondiendo a las necesidades reales del mercado laboral. Su estudio Formación del talento humano frente a la demanda actual y futura de la República Dominicana revela un panorama preocupante.
Actualmente, el 45 % de los estudiantes universitarios se concentra en carreras como Educación, Psicología, Contabilidad, Medicina y Derecho. Aunque son profesiones importantes, registran el menor crecimiento salarial. Mientras tanto, solo un 12 % elige áreas de alta empleabilidad y mejores ingresos, como STEM e idiomas.
La situación empeora en la educación técnica superior: apenas un 3 % de matrícula, pese a ser uno de los campos más demandados por las empresas. Esta brecha entre lo que estudian los jóvenes y lo que necesitan las compañías genera un impacto directo en la empleabilidad.
Empresas con vacantes, jóvenes sin oportunidades
El 54 % de las empresas dominicanas asegura tener problemas para contratar personal calificado. Como resultado, un 38 % invierte recursos en capacitar a sus empleados recién contratados, un gasto que podría evitarse con una mejor preparación desde la academia.
El estudio de la Iniciativa Empresarial para la Educación Técnica (IEET) titulado Mejores prácticas para el impulso de la inserción laboral juvenil (primer empleo) en la República Dominicana refuerza el diagnóstico: el país ocupa el tercer lugar en América Latina con mayor proporción de jóvenes que ni estudian ni trabajan. Se trata de un 26.6 % de la población entre 15 y 24 años, cifra que en las mujeres sube hasta 31.7 %.
El empleo juvenil también es precario. En ese mismo rango de edad, un 37.3 % ocupa puestos de baja calidad en comparación con grupos mayores. La falta de estabilidad y de oportunidades de crecimiento está conectada, según el Centro de Análisis de Datos de Seguridad Ciudadana (CADSECI), con la alta participación de jóvenes en hechos delictivos.
Urgencia de una estrategia disruptiva
ANJE insiste en que este panorama requiere cambios de fondo. No se trata solo de reformar los programas académicos, sino de implementar una estrategia que combine formación pertinente, programas de primer empleo y experiencias prácticas dentro de las empresas.
El nuevo Sistema Nacional de Prácticas y Pasantías Profesionales en la Educación Superior, impulsado por el MESCyT y el Ministerio de la Presidencia, es visto como un paso clave. Sin embargo, ANJE subraya que debe ponerse en marcha con rapidez y sin burocracia, para que realmente funcione como puente entre la academia y el sector productivo.
Alianzas público-privadas como motor
La solución no puede quedar en manos del Estado únicamente. ANJE señala que las alianzas público-privadas son estratégicas. Ejemplos como la Alianza Empresarial de INDOTEL para impulsar habilidades STEM o la propia IEET muestran que el sector privado puede ser un aliado crucial para cerrar la brecha.
En línea con su agenda Deseos ANJE 2025, la organización reafirma su compromiso de trabajar junto a empresas, universidades y el Estado para lograr un sistema educativo que genere empleos de calidad, eleve la competitividad nacional y ofrezca a la juventud dominicana un futuro con movilidad social y desarrollo sostenible.
Invertir en talento alineado con la realidad productiva ya no es opcional. Es la única vía para enfrentar el desempleo juvenil y fortalecer la economía del país.