DNCD incauta fusil y 9.8 libras de drogas, y arresta a dos presuntos distribuidores.
En un golpe directo al corazón del microtráfico, agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD), en coordinación con el Ministerio Público, desmantelaron un centro de distribución de estupefacientes en la provincia de Peravia. El operativo, ejecutado en una vivienda del sector Santa Cruz en Baní, culminó con la detención de dos hombres y la incautación de un arsenal de drogas y armas.
El allanamiento, realizado con orden judicial y basándose en trabajos de inteligencia, sacó a la luz una operación de venta al menudeo que afectaba a varios barrios de la zona. Las autoridades confiscaron un total de 9.78 libras de sustancias controladas, desglosadas en 2.69 libras de cocaína, una paca de 6.17 libras de marihuana, y aproximadamente 0.01 libras de crack.
Una captura clave y conexiones peligrosas
Los detenidos fueron identificados como Carlos Ernesto Díaz (Carlitos) y Miguel González Lora (Puig), ambos señalados como distribuidores de drogas en la región. La captura de Díaz tiene un matiz particular: el hombre era buscado por la DNCD después de que atacara a tiros a un equipo operativo que le estaba dando seguimiento.
Además, "Carlitos" es hermano de Rafael Antonio Díaz (alias "Buche"), quien cumple una condena de 20 años por la muerte del coronel Daniel Ramos Álvarez, lo que sugiere posibles conexiones con redes criminales más amplias.
El operativo no solo se enfocó en las drogas. La DNCD también confiscó un fusil sin marca con sus municiones de calibre 5.56, un elemento que subraya la peligrosidad de la red desmantelada.
Junto al arma, se encontraron cinco balanzas, que confirman el rol de la vivienda como punto de empaquetado y venta.
También se incautaron cuatro celulares, que serán sometidos a un análisis forense para obtener más información sobre la red, así como 95,880 pesos dominicanos y 7 dólares estadounidenses, presumiblemente producto de la actividad ilícita.
Los dos sospechosos fueron puestos a disposición de la justicia de Baní, donde enfrentarán cargos por violación a la Ley 50-88 sobre drogas y sustancias controladas.